CANCÚN. Un disturbio tropical con probabilidad de potencial ciclón se formó en el suroeste del mar Caribe, de acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), por lo que el Consejo de Protección Civil de Quintana Roo mantiene un monitoreo de ese fenómeno hidrometeorológico.
De acuerdo con el SMN, organismo dependiente de Comisión Nacional del Agua, esa zona de baja presión mantiene 70 por ciento de probabilidad para desarrollo ciclónico en 48 horas, por lo que es posible que se desarrolle como depresión tropical entre hoy y mañana en los países centroamericanos, y se dirige hacia el canal de Yucatán, entre Quintana Roo y Cuba, donde podría cobrar fuerza en los próximos días.
El fenómeno hidrometeorológico se localizaba la tarde de ayer a mil 80 kilómetros al sureste de Puerto Costa Maya, Quintana Roo, y mantiene un desplazamiento hacia el noroeste, por lo que existe la posibilidad de que avance en dirección al Golfo de México, aunque esto dependerá de su evolución en los próximos días, de acuerdo con el SMN.
Asimismo, el organismo indicó que monitorea la formación de otra zona de baja presión en el Atlántico Norte, que presenta 10 por ciento de probabilidad para desarrollo ciclónico en 48 horas y se ubica al norte de Puerto Rico, a mil 990 kilómetros al este de Cancún. Ante el acercamiento de estos fenómenos, las autoridades de Protección Civil del estado llamaron a la población a tomar precauciones debido a que se esperan lluvias puntuales muy fuertes en la mayoría de los municipios de Quintana Roo debido al ingreso de aire húmedo de ambos océanos y a canales de baja presión, en interacción con inestabilidad en niveles altos de la atmósfera, de acuerdo con el reporte del Servicio Meteorológico Nacional.
“Las lluvias fuertes a muy fuertes podrían ocasionar encharcamientos, inundaciones y deslaves, así como incrementar los niveles de ríos y arroyos, y las rachas de viento fuertes a muy fuertes podrían derribar árboles y anuncios publicitarios”, advirtió en su comunicado el SMN. Las autoridades recomendaron a la población atender las observaciones de la Conagua y seguir recomendaciones de las autoridades ante cambios en los pronósticos.