La idea de ser policía fue un sueño. Un sueño que tenía como propósito hacer buenas acciones en beneficio de las personas y de la propia familia, porque eso es lo que se necesita la sociedad, gente buena y con vocación de servir a los demás, comenta Diana Estefani Romualdo Cruz, una de las mujeres que el miércoles se integró de manera formal a las filas de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM) de San Juan del Río.
Diana recibió su nombramiento como elemento activo de la corporación de seguridad dentro del evento conmemorativo por el Día del Policía que se realizó en el Centro Cultural y de Convenciones (Cecuco). Con un brillo en los ojos por el logro alcanzado, dice que unirse a la policía municipal es para contribuir al municipio de San Juan del Río, pero también para dar un ejemplo a su hijo, a la ciudadanía y a las mujeres.
“Con base en los conflictos que se dan en nuestra misma comunidad vemos que se necesita la ayuda de gente, de gente valiente, porque esto (ser policía) es de ser valiente, de tener una vocación de servir, servir a nuestra familia, servir a los ciudadanos y de servirnos a nosotros mismos, porque entre nosotros también nos debemos de cuidar”, señala.
Otra de las mujeres que recibió su nombramiento como elemento activo de la SSPM es Maura Daniela Rodríguez Olvera, una joven de 21 años de edad y sanjuanense de corazón. Ella dice que ser policía le permitirá ayudar a la ciudadanía combatiendo los delitos y la delincuencia para construir con ello un mejor municipio para quienes en él habitan.
Fue Maura quien durante el evento dirigió unas palabras en nombre de sus demás compañeros. Ahora, debajo del templete y con los nervios aun recorriendo su cuerpo, menciona que el objetivo de sus tareas en esta nueva etapa será tener proximidad con la ciudadanía para que demostrar que San Juan del Río cuenta una policía confiable.
“El objetivo de todo esto es ayudar a la ciudadanía, combatir los delitos y pues tener proximidad con la ciudadanía, de que también se sienta segura, de que sepa que tiene una policía en la que puede confiar y que ellos mismos se sientan seguros”, detalla.
Finalmente, ambas coinciden que el proceso para llegar hasta este punto no fue fácil, pues estuvo lleno de sacrificios, especialmente aquel que las obligaba a estar lejos de sus familias. Sin embargo, afirman, todo ello valió la pena, pues ahora ya son parte de la policía municipal de San Juan del Río. Ahora son ellas quienes estarán ahí, sirviendo y ayudando a las y los ciudadanos que lo demanden.
