Tras el brutal accidente que colapsó la carretera 57 donde dos unidades motoras terminaron reducidas a cenizas, y hubo seis lesionados, el caos se extendió por casi 9 horas luego del percance, la rapiña no se hizo esperar.
Al conocer que en la carretera 57 había ocurrido este incidente a la altura del trébol, gente comenzó a congregarse en las inmediaciones del lugar, para ver que se podían llevar de la mercancía que quedó extendida en la cinta asfáltica.
La carga de uno de los pesado del camino eran aguas embotelladas, por lo que personas, de entre las cenizas sacaron las más que pudieron y las comenzó a depositar en bolsas plásticas y costales llevándoselas, arriesgando su integridad ya que al momento que fue reabierta la circulación los vehículos circulaban a alta velocidad pudiéndose llevar a algún despistado.
Otras más, juntaron flores que transportaban las camionetas que escenificaron este percance, sin embargo, los dueños de la mercancía habían arribado a la zona desde temprana hora e incluso ya habían llegado con otras de sus unidades para recuperar la mayor cantidad de mercancía.
Protección Civil informó que la circulación fue reabierta en dos carriles a las 08:46 horas, a esa hora la rapiña ya estaba en todo su esplendor, luego de que el propietario de la carga de flores logró subir a su camioneta su mercancía se retiró.
Fue en ese momento que elementos federales quienes se encontraban resguardando la zona solicitaron a la gente se retirara para con las grúas mover los restos de las quemadas unidades, reabriendo con normalidad la circulación a las once de la mañana.
Cabe señalar que la circulación se vio severamente afectada al interior del municipio sanjuanense pues muchos automovilistas quienes han usado la pista 57 ocuparon las calles del municipio como vía alterna lo que desquició el tráfico en las calles aledañas a la carretera.