Muerto a balazos en El Organal

ARMANDO VELAZCO

  · viernes 25 de mayo de 2018

La víctima era trasladada a un hospital, sin embargo, dejó de existir en el trayecto, a bordo de una camioneta.

Herida producida por proyectil de arma de fuego acabó con la vida de quien llevó el nombre de Melquiades “N”, que contara con aproximadamente 58 años de edad a manos de un desconocido que ya es buscado por las autoridades policiacas.

Datos extraoficiales indican que en la comunidad de El Organal se suscitó una riña a golpes, que presuntamente iba dominando la situación Melquiades, lo que dio origen a que su antagonista no identificado sacara de entre sus ropas un arma de fuego que accionó en su contra.

De la misma forma trascendió que la víctima recibió un disparo en una de sus extremidades inferiores que le habrían provocado abundante hemorragia. Inmediatamente fue auxiliado para ser trasladado a un hospital a bordo de una camioneta.

Personal paramédico le brindó los primeros auxilios a bordo de la camioneta, sin embargo, por la gravedad que presentaba el hombre cayó en paro, debiendo los emergencistas aplicarle reanimación cardio pulmonar, pero desgraciadamente no se logró rescatarlo de las garras de la muerte.

En relación a los hechos que enlutaron un hogar no se proporcionaros mayores detalles, solamente se indicó que fue derivado de una riña en la citada comunidad y que la víctima dejó de existir cuando era trasladada al hospital.

Seguridad Pública Municipal fue notificada de lo ocurrido, trasladándose al sitio donde yacía el hombre fallecido, mientras que otros oficiales se dirigieron a la comunidad en busca del asesinato, al que no encontraron.

Los representantes de la ley informaron de lo ocurrido al Fiscal en turno que con sus auxiliares y peritos en criminalística de campo, medicina y fotografía, se constituyó al punto a iniciar la diligencia de levantamiento de cadáver e iniciar las primeras indagatorias la Policía de Investigación del delito.

Efectuada la diligencia ministerial, el cadáver fue trasladado al Servicio Médico Forense, donde se le practicó la necrocirugía de ley, dándose inicio a una carpeta de investigación por el delito de homicidio, en contra de quién resulte responsable. Poco después, los deudos acudieron a identificar y reclamar oficialmente los restos mortales, solicitud que se cumplió luego que dos de ellos rindieran su declaración ministerial en calidad de testigos de identificación cadavérica.

Presumiblemente el autor del asesinato está plenamente identificado y que solo es cuestión de tiempo para su detención.