Dos hombres, que presumiblemente trabajaban para una empresa gasera, fueron asesinados en las inmediaciones de la comunidad de El Tejocote, Tequisquiapan, conociéndose que estaban en calidad de desaparecidos desde la tarde del martes y fue la noche del miércoles que fueron descubiertos.
Estas dos víctimas, en vida llevaron los nombres de César y Mario de apellidos Reséndiz Martínez, informándose de manera extraoficial que prestaban sus servicios para una empresa gasera, se citó que no aparece el vehículo tipo cisterna en el que laboraban, y que su domicilio estaba ubicado en la comunidad de La Valla.
Del hallazgo de los cuerpos se dio aviso a las autoridades de Seguridad Pública Municipal de Tequisquiapan, que tras corroborar la autenticidad del reporte, dio paso al protocolo de preservación de evidencias acordonando el sitio, solicitando la intervención del Fiscal que con el equipo de peritos en criminalística de campo, medicina y fotografía forense, se constituyó en el escenario a tomar conocimiento, recuperar evidencias e iniciar las primeras indagatorias la Policía de Investigación del Delito.
En relación a los hechos lamentables, la Fiscalía General del Estado informó que dio inicio a una carpeta de investigación por el hallazgo de dos personas sin vida en la comunidad de El Tejocote, perteneciente al municipio de Tequisquiapan.
Los hombres ya fueron identificados y eran vecinos del municipio de San Juan del Río (La Valla). Testigos indicaron que el día previo al hallazgo vieron a los hombres discutiendo con un grupo de sujetos, quienes les proferían amenazas, situación que no fue denunciada ante autoridad alguna.
Con base en esta referencia, la Fiscalía se encuentra indagando las actividades y relaciones personales de las víctimas, con la finalidad de identificar a las personas responsables de estos hechos.
El Fiscal, en el lugar de los hechos realizó la correspondiente diligencia, y tras ello se ordenó que los cadáveres fueran depositados en el Servicio Médico Forense para la necropsia de ley, la cual revelará la causa de muerte.
Las autoridades de la Fiscalía no informaron si las víctimas estaban atadas, o presentarían lesiones por arma blanca o de fuego, pero a simple vista se observó que sí tenían huellas de golpes.
Horas después, los afligidos deudos acudieron ante las autoridades a identificar oficialmente los cuerpos y reclamar su devolución, citándose que tras la declaración de dos de ellos, en calidad de testigos de identificación cadavérica, los recibieron para velarlos y en su momento darles cristiana sepultura.
