Un hombre resultó gravemente herido tras una brutal explosión de un contenedor dentro de una bodega tratadora de biodiesel, el hecho se presentó al momento que trabajadores estaban en labores para dar cumplimiento y obtener la licencia de funcionamiento municipal así como el visto bueno de Protección Civil. La situación se presentó en el camino de terracería antiguo a La Trinidad, en Tequisquiapan.
Fue poco antes de las tres de la tarde de ayer, cuando vecinos de la zona en redes sociales reportaron el estruendo y luego, al voltear al cielo, la enorme columna de humo negro que se podía observar a kilómetros de distancia.
Varios reportes se hicieron al 911, indicando que se trataba de las bodega de hidrocarburo, lo que provocó la movilización de importante número de cuerpos de emergencia, así como de autoridades de los tres órdenes de gobierno.
El titular de Protección Civil, Sergio Trejo informó en el sitio que se trataba de una planta tratadora de biodiésel que ya había sido clausurada, y que además se encontraba en proceso del trámite del permiso correspondiente para su operación.
“Se hizo una visita el día 15 de marzo y se colocaron sellos de observación, el día de hoy estaban trabajando para cumplir con las mejoras y poderse regularizar, ocurriendo la explosión”, indicó el titular.
La explosión fue de tal magnitud que una de las partes altas del contenedor salió volando hacia una de las parcelas de cultivo, a casi trescientos metros del lugar, el hombre que resultó gravemente herido fue subido a una ambulancia y lo estabilizaron, se informó que llevaba heridas de consideración.
En la zona se trabajó para controlar el fuego con el apoyo de los bomberos voluntarios de Tequisquiapan quienes descartaron algún riesgo para la población, además se informó que los trabajos se extenderían por un par de horas más y que al final, el departamento de ecología municipal colocaría el sello de clausura.
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Los pobladores se mantuvieron en las inmediaciones para saber como estaban sus familiares, además, un hombre que tenía animales en el lugar comentó que cuando llegó a su corral todos estaban bien, solo algunos vidrios se habían roto por la onda expansiva.