Las fuerzas del régimen sirio y sus aliados están hoy en alerta ante una posible acción militar de Estados Unidos en represalia por el presunto ataque químico en la ciudad de Douma, el cual debería ser investigado por expertos de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ).
Las tropas gubernamentales sirias fueron puestas en estado de alerta luego que la comandancia del régimen sirio les ordenó movilizarse durante 72 horas en todas sus bases y aeropuertos militares en Damasco y su periferia, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Dicha orden alcanza a las posiciones gubernamentales en las provincias de Al Sueida (sur), Hama y Homs (centro), Tartús y Latakia (noroeste) y Deir Ezzor (noreste), además los aliados extranjeros de las fuerzas sirias, entre los que hay rusos, iraníes y libaneses, recibieron instrucciones de permanecer en alerta.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó la víspera con responder “contundentemente” en breve al ataque químico perpetrado el fin de semana en la ciudad de Douma, último bastión rebelde en la región de Ghouta Oriental, en las afueras de Damasco, que dejó casi medio centenar de muertos.
La Sociedad Médica Siria Estadunidense (SAMS) y la Defensa Civil Siria, conocida como los Cascos Blancos, ambas apoyadas por Estados Unidos, denunciaron que el Ejército sirio lanzó barriles que contenían gas sarín y gas cloro sobre Douma, donde al menos 42 personas murieron y unas 500 fueron afectadas con síntomas de asfixia.
Tanto el régimen sirio como Rusia han negado el empleo de sustancias químicas en Douma e insisten en que expertos de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) investiguen lo ocurrido.
El gobierno sirio, a través de su cancillería, ha enviado una invitación a la OPAQ para que envíe un equipo de expertos a Douma, además ofreció su cooperación para descubrir la verdad sobre las alegaciones promovidas por algunos países occidentales, reportó este martes la agencia local de noticias SANA.
“En respuesta a las falsas acusaciones hechas por algunos países occidentales contra Siria (…) la cancillería ha remitido una invitación formal a la OPAQ para enviar un equipo de su misión de investigación a Douma e indague las denuncias sobre el presunto uso de armas químicas”, señaló.
“Siria confirma su determinación de proporcionar toda la asistencia necesaria para el funcionamiento de la misión de la OPAQ (…) Espera que el trabajo sea totalmente transparente”, agregó la cancillería siria.
Rusia también insiste en que la OPAQ realice una investigación en el lugar del supuesto ataque químico, garantizando la seguridad de las pruebas durante su transporte a los laboratorios correspondientes, para que todo sea transparente, según el canciller de ese país, Serguei Lavrov.
“Para lograrlo presentaremos este martes ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas un proyecto de resolución que exigirá justamente esta investigación transparente, en respuesta a la invitación directa del gobierno sirio, que está dispuesto a recibir a expertos de la OPAQ”, indicó.
Respecto sobre si la OPAQ ha aceptado la investigación, Lavrov precisó que Rusia no ha recibido esta respuesta. “Oímos declaraciones desde La Haya de que expertos de la organización ya comenzaron a investigar las denuncias del presunto ataque químico”, dijo.
Asimismo, advirtió que Rusia “no confiará a ciegas en resultados de una investigación llevada a cabo a distancia”, como ocurrió hace un año tras el ataque químico en la localidad de Jan Sheijun, donde más de 80 personas murieron y del que la Organización de las Naciones Unidas culpó a Damasco.
"Aquella investigación realizada a distancia dio como fruto un informe inadecuado, lleno de expresiones como 'altamente probable' o 'muy verosímil'", recordó.
En represalia a ese ataque en Jan Sheijun, Estados Unidos ordenó lanzar decenas de misiles contra la base aérea siria de Al Shairat, en la provincia central de Homs.
