El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, advirtió el martes a Estados Unidos y China de una nueva degradación del mundo que ya está al "borde del precipicio", instándolos al diálogo y "comprensión" en la apertura de la Asamblea General anual de Naciones Unidas.
"Nos enfrentamos a la mayor cascada de crisis de nuestra vida", advirtió en el discurso de apertura de la Asamblea General de Naciones Unidas.
"Temo que nuestro mundo se dirige hacia dos conjuntos diferentes de reglas económicas, comerciales, financieras y tecnológicas, dos enfoques divergentes en el desarrollo de la inteligencia artificial y finalmente dos estrategias militares y geopolíticas diferentes", aseguró.
"Es una receta para los problemas. Esto sería mucho menos predecible que la Guerra Fría. Para restaurar la confianza e inspirar la esperanza, se necesita la cooperación", instó el máximo responsable de la ONU en el foro, ante la presencia de dirigentes mundiales, entre ellos el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que decidieron acudir a Nueva York pese a la pandemia de covid-19.
"Necesitamos dialogar. Necesitamos comprensión. Necesitamos invertir en la prevención, el mantenimiento y la consolidación de la paz. Necesitamos avances en materia de desarme nuclear y en nuestros esfuerzos en la lucha contra el terrorismo. Necesitamos acciones ancladas en el respeto de los derechos humanos", insistió Antonio Guterres.
En una alusión implícita a Birmania, Malí, Guinea o Sudán, el responsable de la ONU lamentó asistir "asimismo a una explosión de tomas de poder por la fuerza".
"Los golpes de Estado militares están de regreso", y "la falta de unidad en el seno de la comunidad internacional no ayuda", lamentó.
"Las divisiones geopolíticas socavan la cooperación internacional y limitan la capacidad del Consejo de Seguridad a tomar las decisiones necesarias. Al mismo tiempo, sería imposible superar los desafíos económicos y de desarrollo dramáticos mientras las dos grandes economías del mundo están en desacuerdo", agregó el jefe de la ONU, señalando con el dedo a Pekín y Washington.
Antonio Guterres, que está en el último año de su primer mandato al frente de la ONU y que iniciará su segundo periodo en enero, ya alertó en 2018 sobre la "división" chino-estodounidense, y calificó de "nueva guerra fría" al riesgo de un mundo bipolar prisionero de las tensiones entre las dos grandes potencias.
La sesión de alto nivel de la Asamblea General de la ONU, en la que participan presencialmente cerca de un centenar de jefes de Estado y de Gobierno y decenas de ministros, tras el parón del año pasado por la pandemia, se proseguirá hasta el lunes.