Una visiblemente emotiva Malala Yousafzai, la ganadora del premio Nobel más joven de la historia, no pudo contener su incredulidad al regresar a casa después de más de cinco años de distancia tras un ataque en su contra del Talibán en la región del Valle del Swat en 2012.
"He soñado con regresar a Pakistán durante los últimos cinco años", señaló Malala en un discurso de bienvenida en Islamabad ante la presencia de autoridades de alto nivel paquisaníes, incluido el primer ministro Shahid Khaqan Abbasi.
Malala regresó a Pakistán en una visita de cuatro días el miércoles por la noche acompañada de su padre Ziauddin, y un hermano.
La estudiante de 20 años de la Universidad de Oxford ha estado viviendo en el Reino Unido después de sobrevivir a un ataque talibán que requirió su partida al extranjero para recibir tratamiento médico.
"Hoy, estoy muy contenta de que, después de cinco años y medio, he vuelto a pisar el suelo de mi nación", comenzó dicendo en urdu (una lengua hablada fundamentalmente en Pakistán), luego en pashto ( la lengua materna de los pastunes del Sur y centro de Asia):
"Hoy es el día más feliz de mi vida, porque he regresado a mi país, he pisado el suelo de mi nación nuevamente y estoy entre mi propia gente", acotó Malala, quien salió de Pakistán para recibir tratamiento tras un atentado de los talibanes por defender la educación femenina.
"Estoy muy feliz, y todavía no puedo creerlo ? si soy sincera ? todavía no puedo creer que esto realmente esté sucediendo, esto es real", prosiguió.
Durante los últimos cinco años, he soñado con volver a casa. cada vez que estaba en un avión o en un coche y veía las ciudades de Londres o Nueva York, me decía "imagínate que se trata de Pakistán, imagínate que te conduce a lslamabad, imaginate que esto es Karachi, y nunca era verdad".
" Y ahora que lo estoy viendo hoy, estoy muy feliz ", continuó en urdu, haciendo una pausa para secarse las lágrimas de los ojos.
"Nací en 1999", afirmó, deteniéndose para limpiarse más lágrimas de los ojos. "No lloro a menudo", sonrió la Premio Nobel de la Paz de 2014.
"Ahora tengo 20 años, pero he visto muchas cosas en el transcurso de mi vida. Desde que crecí en Swat, fue un lugar tan hermoso" hasta ver el terrorismo y el extremismo desde 2007 hasta 2009. Y luego ver cuántas dificultades enfrentan las mujeres y las niñas en nuestra sociedad, y cómo podemos luchar contra esos desafíos ".
"Y luego ser atacado, abandonar mi país ... Todo estaba sucediendo ... no podía controlar nada. Si fuera por mí, nunca habría salido de mi país. Los médicos me practicaron una cirugía y me salvaron la vida. para un tratamiento posterior tuve que salir y continuar mi educación", precisó.
"Pero siempre fue mi sueño que regrese a Pakistán. Y quiero poder moverme libremente por las calles y reunirme y hablar con la gente pacíficamente, sin ningún temor. Y espero que sea como mi antiguo hogar ? justo como estaba ", anotó.
"Necesitamos invertir en la educación de los niños. El Fondo Malala ya está trabajando en esto. Hemos invertido más de seis millones de dólares en educación para niñas en Pakistán, y continuamos este trabajo ..."
"Espero que todos podamos unirnos esta misión para el mejoramiento de Pakistán, para que nuestra futura generación pueda recibir la educación adecuada y las mujeres puedan empoderarse, hacer trabajos, sostenerse por sí mismas y ganar para sí mismas. Ese es el futuro que queremos ver", manifestó.
"Las mujeres también pueden ser superhéroes, empresarias... necesitan ejemplos", afirmó la joven, quien exhortó a un público formado por parlamentarios y otras autoridades a se uniese a su lucha.
El primer ministro Abbasi sostuvo que está feliz de que una hija de la nación haya regresado a su tierra natal.
"Fuiste una niña de 13 años cuando te fuiste y ahora eres la ciudadana más famosa del país. El mundo entero te dio honor y respeto y Pakistán lo hará también".
La joven adquirió notoriedad al escribir un blog para la BBC utilizando el seudónimo de Gul Makai en el que denunciaba las atrocidades sufridas bajo el régimen del Tehrik-i-Taliban (TTP).
El 9 de octubre de 2012 fue víctima de un atentado en Mingora, en el noroeste del país, cuando dos miembros del TTP se aproximaron al vehículo escolar en el que se encontraba Malala y le dispararon con un fusil, alcanzándola en el cráneo y en el cuello.