El presidente francés, Emmanuel Macron, presentó las líneas generales de un plan millonario, de más de nueve mil millones de dólares, para “prevenir y luchar” contra la pobreza en el país.
Según la Presidencia, el gobierno destinará nueve mil 300 millones de dólares, durante los próximos cuatro años, para reducir la pobreza en Francia, considerada la quinta economía mundial.
Se trata de una “estrategia nacional”, según el presidente, que busca “frenar las desigualdades del destino que se perpetúan de generación en generación”.
El plan está centrado en la prevención de la pobreza, sobre todo de los más jóvenes, y en la ayuda a la reinserción en el empleo.
De acuerdo datos oficiales, Francia, que tiene 67 millones de habitantes, contaría con nueve millones de pobres, entre ellos tres millones de niños.
“Tras esas cifras a las cuales nos acostumbramos está el escándalo de la pobreza”, declaró Macron, quien reconoció que el actual “modelo” económico y social “permite corregir un poco vivir mejor, pero no permite suficientemente la prevención de la pobreza, erradicarla”.
Entre otras medidas, el mandatario propuso que en los comedores escolares se ofrezcan los menús a un euro (1.16 dólares), para ayudar a los hijos de las familias de escasos recursos.
El plan contra la pobreza de Macron fue visto por analistas como una manera de cambiar su imagen de “presidente de los ricos”, como es llamado habitualmente entre la prensa local.
