El gobierno israelí anunció el viernes nuevas restricciones en los vuelos internacionales, como parte de las medidas que están tomando para contener la pandemia del nuevo coronavirus.
La ministra de Transportes, Miri Regev, explicó este viernes que el aeropuerto internacional Ben Gurion de Tel Aviv permanecerá abierto, pero que solo podrán volar aquellos pasajeros que hayan comprado un billete de avión antes de este viernes a las 11H00 GMT y que hayan dado negativo por coronavirus en una prueba de diagnóstico.
"Las personas que compren un billete después no podrán usarlo", dijo, especificando que los israelíes podrán volver al país "sin limitaciones".
La ministra no se refirió de momento a la situación de los trabajadores extranjeros o de las personas con estatuto de residentes en Israel.
Desde el jueves, con la propagación de los rumores de cierre, los viajeros acudieron masivamente al aeropuerto de Tel Aviv, donde la mayoría de los vuelos estaban completos.
Y el viernes a media jornada, una larga cola de pasajeros se había formado ante los mostradores del aeropuerto, según un videasta de la AFP presente en el aeropuerto Ben Gurion.
Israel registra un preocupante aumento de contagios por covid-19, que esta semana llegaron a unos 6.000 diarios. Desde el inicio de la pandemia, más de 1.200 personas murieron por coronavirus en el país.
El confinamiento parcial impuesto desde principios de septiembre, y luego el generalizado que entró en vigor la semana pasada no han sido suficientes para frenar la circulación del virus en este país de 9 millones de habitantes, elogiado por su gestión de la crisis al principio de la pandemia, la pasada primavera boreal.
Según los datos de la AFP, Israel es el país del mundo que ha registrado el mayor índice de contaminación en las últimas dos semanas.