El Covid-19 ha causado 53 nuevas muertes en Honduras, con las que la cifra de decesos aumentó a 1.312, mientras que los contagios superan los 41.000, informó este jueves el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager).
El país centroamericano sigue teniendo una alta incidencia de muertos y contagios a causa de la pandemia, desde que fueron confirmados los primeros dos infectados el 11 de marzo.
En su informe de hoy, el Sinager señaló que de 1.326 nuevas pruebas de laboratorio PCR, 482 dieron positivo, elevando los contagios a 41.426.
De nuevo, Cortés y Francisco Morazán, en el norte y centro del país, siguen siendo los principales epicentros de la pandemia, con más casos de contagios acumulados y muertes, lo mismo que de recuperados, que ya suman 5.443, con 162 añadidos hoy a las estadísticas oficiales.
El Sinager también registró hoy que 1.432 personas están hospitalizadas por contagio con la enfermedad, de las que 1.040 permanecen estables, 340 en estado grave y 52 en unidades de cuidados intensivos a nivel nacional.
La tasa de letalidad por Covid-19 es de 3,16 por ciento, según el informe oficial.
Las cifras del Sinager van con retraso debido a la falta de suficientes pruebas diarias de laboratorio que se van practicando.
Según fuentes médicas que están al frente de la pandemia, Honduras necesita tener de 2.000 a 3.000 pruebas diarias procesadas para tener mejor información sobre dónde están los contagiados con Covid-19.
La mora, que según algunos médicos de hospitales públicos tiene el Laboratorio Nacional de Virología, es de unas 7.000 pruebas, mientras el pico de la pandemia sigue en alza, cuando en principio se creía que hacia julio la curva estaría siendo aplanada.
A casi cinco meses de pandemia, los casos de contagios y muertes no cesan, afectando cada día no solamente en lo social, sino también en lo económico al país, de 9,3 millones de habitantes, de los que más del 60 % son pobres.
La situación sigue siendo alarmante en Honduras, que además ha reanudado esta semana la "fase uno" para la recuperación de su economía, entre el descontento de algunas comunidades y sectores productivos que, por la alta incidencia de contagios, han quedado fuera de la medida, temporalmente.