China anunció este martes la suspensión de acuerdos de extradición entre Hong Kong y tres países occidentales (Canadá, Australia y Reino Unido) que criticaron la aplicación por parte de Pekín de una ley sobre seguridad en el territorio autónomo.
Esos tres países ya habían suspendido de manera unilateral esos acuerdos en señal de protesta contra esa nueva legislación en vigor desde el 30 de junio en la excolonia británica.
"Esas acciones erróneas (...) perjudicaron de manera grave las bases de la cooperación judicial", declaró a la prensa Wang Wenbin, portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores.
"China decidió suspender los tratados de extradición entre Hong Kong y Canadá, Australia y el Reino Unido, así como los acuerdos de cooperación en material de justicia penal", subrayó.
Varios países occidentales, con Estados Unido a la cabeza, instaron a China a dar marcha atrás con esa ley de seguridad nacional en Hong Kong.
Esta nueva ley hace temer a la oposición demócrata local un retroceso grave de las libertades en vigencia en ese territorio de 7,5 millones de habitantes, devuelto por el Reino Unido a China en 1997.