China prometió el jueves "una respuesta apropiada y necesaria" ante las nuevas restricciones contra sus diplomáticos en Estados Unidos, en un contexto de fuertes tensiones entre las dos potencias.
Washington, que a menudo denuncia trabas en China para sus diplomáticos, impuso el miércoles al cuerpo diplomático chino nuevas obligaciones, alegando "reciprocidad".
A partir de ahora, los diplomáticos de Pekín deberán pedir una autorización si deseen acudir a campus de universidades y reunirse con dirigentes locales.
Hua Chunying, una portavoz de la diplomacia china, dijo el jueves ante la prensa que se trataba de "una violación grave del derecho internacional y de las normas fundamentales de las relaciones internacionales".
China "dará una respuesta apropiada y necesaria en función de la evolución de la situación", aseguró Hua, sin dar más precisiones.
El jefe de la diplomacia estadounidense, Mike Pompeo, indicó también que "los eventos culturales que reúnan a más de 50 personas" organizados por las misiones diplomáticas chinas en el exterior de sus sedes oficiales deberán recibir el visto bueno de las autoridades estadounidenses.
Esta medida tiene lugar en un contexto de tensas relaciones entre China y Estados Unidos, deterioradas últimamente por las cuestiones de Hong Kong, la crisis sanitaria o los derechos humanos.
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