Alemania quiere imponer una cuarentena de 14 días a todos los viajeros que regresen tras una estancia en el extranjero, como parte de la lucha contra el nuevo coronavirus, anunció este lunes un portavoz del Ministerio del Interior.
Se trata de una recomendación formulada por un consejo de ministros dedicado a las medidas relacionadas con la pandemia y dirigida a los 16 Estados regionales que adoptan la decisión en última instancia.
La medida debe entrar en vigor el 10 de abril, según el portavoz, y afectará a los alemanes y a los nacionales de Estados de la Unión Europea (UE), que cerró sus fronteras exteriores.
Sin embargo, la cuarentena de los viajeros podría suscitar descontento en algunas regiones fronterizas.
Alemania impuso ya desde el 16 de marzo drásticos controles en sus fronteras terrestres con Francia, Austria, Suiza, Luxemburgo y Dinamarca para tratar de limitar la propagación de la COVID-19.
Según el portavoz del ministerio del Interior, 70.000 personas han sido obligadas a regresar en las fronteras desde la ejecución de la medida.
En los últimos 20 días, se han repatriado también unos 220.000 alemanes que se encontraban en el exterior en el momento en que la pandemia, que ha dejado en el país más de 1.400 muertos, arreció en Europa.