La céntrica calle 2 de abril, en donde tradicionalmente se llevaba a cabo el viacrucis de la pasión y muerte de Cristo, permaneció completamente vacía este Viernes Santo, tras suspenderse las celebraciones eucaristicas debido a la pandemia del Covid-19.
A este lugar arribaban cientos de personas quienes subían a la cumbre del calvario en procesión con las imágenes que salían de la Parroquia de San Juan Bautista, ahí también los vecinos se organizaban para colocar palmas y pendones en color blanco y morado, para guiar el camino del viacrucis.
En esta ocasión derivado de las recomendaciones de las autoridades de salud de los diferentes órdenes de gobierno, nada de esto se pudo llevar a cabo, sin embargo, la fe de los vecinos de esta emblemática calle pusieron nuevamente estos pendones y moños en señal de su feligresía.
Al cuestionar a algunos de los habitantes de esta calle, argumentaron que es la primera vez que tienen que suspender este pasaje bíblico, lo cual les entristece, pero dijeron que los llama a la oración y a seguir quedándose en casa hasta que pase la contingencia, además de que los une como familias.
Indicaron que como en años anteriores decidieron colocar los colores morado y blanco afuera de sus viviendas, y que durante estos días los vecinos se pusieron de acuerdo para hacer una novena familiar a Cristo y a la Virgen de Guadalupe.