UAQ produce caretas protectoras

Desarrollaron un prototipo de careta protectora para el personal de salud que se encuentra en la primera línea de atención a pacientes

Dolores Martínez|El Sol de San Juan del Río

  · domingo 5 de abril de 2020

La protocolización de este instrumento ya está avalada por personal médico. /Foto: Cesar Ortiz./ El Sol de San Juan del Río.

Estudiantes, egresados y docentes de la Facultad de Ingeniería (FI) campus San Juan del Río, de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), desarrollaron un prototipo de careta protectora para el personal de salud que se encuentra en la primera línea de atención a pacientes, con una reducción significativa en costo y tiempo de producción.

En el primer lote de 60 caretas elaborado por la FI, que dirige el Dr. Manuel Toledano Ayala, fue entregado a la doctora Laura Ramírez, directora del Hospital General Regional de la zona #3 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS); y en los próximos días, este nosocomio será recipiendario de 100 caretas más.

Foto: Luis Luévanos | El Sol de San Juan del Río.

Luis Alberto Morales Hernández, coordinador de la FI campus San Juan del Río, manifestó que el diseño de la careta fue elaborado por la egresada de la maestría en Mecatrónica de esta unidad académica, Sofía Vega Mancilla y de su hermano, Salvador Vega Mancilla, estudiante del último semestre de Ingeniería Electromecánica; bajo la premisa de que las caretas son uno de los artículos más necesarios para proteger a los doctores y enfermeras encargados de la atención médica de los pacientes del COVID-19.

Dijo que careta de protección, cuyo armado se efectúa en tres minutos aproximadamente, consiste en un arillo plástico y acetato que protege ojos, nariz y boca del usuario, e incluso fue puesto a valoración de personal médico del propio Hospital General de la zona #3, quien lo avaló por cómodo y funcional.

Foto: César Ortiz | El Sol de San Juan del Río.

El equipo de la FI también está en proceso de construcción de una caja protectora, hecha de acrílico, para resguardar la cabeza del paciente con enfermedad respiratoria, a fin de evitar que sus secreciones puedan diseminar el virus entre el personal sanitario que lo atiende.