El tiradero clandestino que se encuentra en un predio ubicado sobre el camino que conduce a la comunidad de Santa Cruz Escandón, en San Juan del Río, se mantiene en llamas. El incendio comenzó el pasado viernes 3 de mayo y a la fecha los desechos siguen encendidos, provocando la emanación de humo contaminante al ambiente, señalaron habitantes cercanos a este lugar.
Mencionaron que desde hace varios días, la presencia de humo y los malos olores han permanecido en el ambiente, lo que ha provocado malestares en la salud a algunas personas. Refirieron que en el entorno se percibe un fuerte olor a plásticos y nubes de humo negro, de manera que consideraron que esta es una situación negativa para el medio ambiente.
“Desde hace una semana sigue prendido ese lugar y es molesto porque hay mucho humo negro y los olores a plástico son muy intensos. Cuando hay mucho viento, el humo llega hasta las casas y es muy molesto porque a veces te cuesta respirar o de plano el olor se queda impregnado en todos lados. Y hay que sumarle que eso también representa una contaminación al medio ambiente”, comentó uno de los vecinos cercanos.
Fue el pasado viernes 3 de mayo cuando el fuego inició en una fracción del predio. Debido a que había plásticos en el lugar, las llamas se extendieron de manera rápida, consumiendo todo a su paso. Al sitio arribaron elementos del Heroico Cuerpo de Bomberos de San Juan del Río, quienes realizaron las labores para tratar de extinguir el incendio.
De acuerdo con vecinos, si bien se controló la situación durante en ese momento, días posteriores el fuego volvió a aparecer, aunque en menor cantidad. En un recorrido por el sitio, EL SOL DE SAN JUAN DEL RÍO pudo constatar que algunas fracciones del predio continuaban encendidas y emanando humo gris y negro. También se observó una gran cantidad de desechos que no fueron alcanzados por las llamas, como llantas, plásticos, telas, cascajo, entre otros.
Luego del incidente, la Secretaría de Desarrollo Sustentable Municipal (Sedesum) colocó sellos de clausura frente al terreno que era empleado como un basurero clandestino. Según lo observado, gran parte de este predio fue utilizado para depositar desechos, principalmente plásticos.
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Por otra parte, el incendio también consumió una casa improvisada que estaba al frente de este terreno. En el lugar habitaban Raymundo Jiménez Hernández y su familia, quienes perdieron todas sus pertenencias. El hombre aseveró que desde hace 50 años reside en el lugar y ha solicitado la ayuda de la ciudadanía para recuperar algunas cosas, como colchones, ropa, comida y muebles.