Aunque las lluvias de los últimos días han aumentado el nivel de las distintas presas que hay en el municipio de San Juan del Río, hasta el momento no existe riesgo de que ninguna de ellas se desborde, toda vez que aún cuentan con capacidad para el almacenamiento, señaló el director local de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en Querétaro, Raúl José Medina Díaz.

Refirió que la temporada de sequía dejó totalmente vacíos los embalses de la demarcación, lo que ha permitido que se llenen de manera paulatina, subrayando que hasta el momento no existen riesgos de desbordamiento y, por ende, peligros para la población. Manifestó que se realiza un monitoreo constante para verificar el nivel de las principales presas que hay en San Juan del Río.

“Se están controlando. Afortunadamente, el tiempo de sequía nos dejó en ceros todos esos embalses y todos los canales. Entonces, el agua que ha estado transitando, que se ha estado recibiendo en estos embalses, ha sido paulatinamente. Todavía no representa ningún riesgo de que puedan verse desbordadas”, comentó durante entrevista.

Explicó que desde que inició la temporada de lluvias, la Conagua estableció un protocolo de vigilancia, a través del cual se realiza la lectura de los niveles de las presas que son administradas por la instancia federal. Detalló que, cuando existe la presencia de precipitaciones, el monitoreo de los embalses se realiza de manera horaria durante todo el día, a fin de vigilar el aumento del agua.

Asimismo, puntualizó que en algunas presas del municipio se realizaron obras de mantenimiento como trabajos de desazolve, reparación de grietas, así como el servicio a los dispositivos mecánicos y eléctricos. Agregó que en cada uno de los embalses se han establecido las políticas de operación en caso de que se registren niveles de agua considerables, esto para prevenir desbordamientos.

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“El tránsito del agua está monitoreado y siempre tiene la oportunidad de poderla desfogar cuando se requiere (…). Ya están establecidas las políticas de operación en estos embalses. Cuando llegan a ciertos niveles, se toman acciones de desfogue, ya sea a través de obras de toma, de las compuertas, o de la instalación que tienen. Entonces, se controla el gasto que viene y el que podemos soltar para no causar riesgos”, apuntó.