Tras nueve meses de formación policial y aprobar exámenes decontrol y confianza, ayer se graduaron 38 jóvenes de la Academiade Policía Municipal, quienes en su toma de protesta como nuevosoficiales, se comprometieron a servir con honestidad a lapoblación de San Juan del Río.
A nombre de sus compañeros de generación, 26 hombres y 12mujeres, habló la oficial, María Elena Romero Jiménez, quien conemotivas palabras expresó a los presentes la importancia decumplir esta meta que implicó sacrificios.
“Fijé un sueño, servir y proteger a nuestra sociedad, supeque sacrificaría muchas cosas, en especial a mi pequeña de dosaños, pero sabía también que valdría la pena, porque ella sesentiría orgullosa de mí, así familiares y amigos de todos miscompañeros, siéntase orgullosos y parte de este logro”.
En su discurso, detalló que algunos de los jóvenes inclusotienen estudios profesionales y se enlistaron con el propósito deprepararse para convertirse en embajadores de la Secretaría deSeguridad Pública Municipal y llevar protección a la poblaciónde San Juan del Río.
“Con vocación, decidimos ingresar al servicio activo, tomamosel camino de proteger a nuestro municipio, en nuestra sangrellevamos ese espíritu guerrero, esa mística, esa vocación delservicio a la patria”.
Manifestó que la vocación del servicio policial es difícil deentender para algunas personas, sin embargo, durante su formación,ella y sus compañeros reconocieron que son capaces de dar la vidapor alguien que se encuentre en riesgo.
“Algunas personas cercanas no entendían por qué ingresar auna institución policial a recibir órdenes y prestar un servicio,a estas personas les decimos que no hay mayor religión que elservicio a los demás, trabajar por el bien común es el mejorcredo”.
En el evento, los nuevos policías estuvieron acompañados defamiliares y amigos, quienes se mostraron orgullos de cada uno delos oficiales, quienes portaron con gallardía su uniforme.