Pinal de Amoles fue sede de la tercera edición de la Feria del Hongo, un evento organizado por la Facultad de Ciencias Naturales (FCN) de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ). La actividad contó con la presencia de autoridades universitarias, así como de comunidad estudiantil y docente de la Institución; se desarrolló en Campo Santo Viejo y sumó a su programa conferencias, degustaciones y talleres.
Al respecto, el profesor e investigador de esta Unidad Académica y organizador del evento, Fidel Landeros Jaime, comentó que este evento tiene como objetivo dar a conocer la riqueza biótica de este municipio serrano y crear conciencia sobre sus múltiples funciones, las cuales van desde su uso comestible hasta aplicaciones medicinales.
La primera edición de la Feria del Hongo se celebró en 2022 y este 2024 ha superado el número de participantes de años anteriores, al atraer a más aficionados y expertos en el tema, lo que refleja el creciente interés por la micología y sus beneficios.
El evento incluyó degustaciones de platillos elaborados con hongos producidos en el laboratorio de microbiología de la Autónoma de Querétaro. Una de las actividades más destacadas fue la realización de dibujos y cuentos por parte de niños, quienes, además de aprender sobre estos organismos, lograron establecer una mayor conexión con el tema a través de estas dinámicas creativas.
Además, el profesor de microbiología de la FCN, Dr. Antonio Cervantes, ofreció una charla sobre la importancia del huitlacoche en la cultura mexicana. Durante su exposición, destacó el valor agregado de este hongo, así como sus múltiples usos en la gastronomía y la medicina, subrayando su relevancia tanto cultural como nutricional.
➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo
El encuentro refleja el compromiso de la Máxima Casa de Estudios del estado con el fomento de la concientización ambiental, cultural y gastronómica de la región serrana, subrayando la importancia de sus recursos naturales. Es importante señalar que Querétaro cuenta con una rica diversidad de hongos que aún no se aprovecha en su totalidad.