Integrantes del Gobierno Municipal de San Juan del Río y de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) realizaron un acto cívico para recordar la lucha de doña Josefa Ortiz de Domínguez, mejor conocida como “La Corregidora” de Querétaro.
El evento se llevó a cabo en las instalaciones de la antigua presidencia municipal, donde se encuentra un busto de dicho personaje.
Fue la mañana del sábado cuando integrantes de las diferentes áreas del Gobierno Municipal, del H. Ayuntamiento y del Ejército Mexicano se hicieron presentes en el patio de la antigua presidencia municipal como rendir el homenaje a doña Josefa Ortiz de Domínguez, considerada como una figura fundamental para la independencia de México, en 1810.
Durante el evento, la titular de la Secretaría de Desarrollo Social del municipio, Judith Ortiz Monroy, leyó una reseña de Josefa Ortiz de Domínguez, recordando que fue esta mujer la que se alertó a Miguel Hidalgo e Ignacio Allende, quienes se encontraban en Guanajuato, sobre el descubrimiento de la conspiración, momento que apresuraría el inicio de la lucha de independencia.
Josefa Ortiz de Domínguez nació el 8 de septiembre de 1768 en la ciudad de Valladolid, hoy Morelia, Michoacán. En 1791 contrajo matrimonio con Miguel Domínguez, el cual fue nombrado corregidor de Querétaro en 1802, por lo que la familia se asentó en la ciudad queretana.
De acuerdo con la historia, en septiembre de 1810 Miguel Domínguez encerró a “La Corregidora” en su habitación para evitar que saliera y alertará a los conspiradores sobre el descubrimiento de sus planes. Sin embargo, ella escribió un mensaje dirigido a Hidalgo y Allende. El mensajero fue Ignacio Pérez, quien se dirigió hacia San Miguel y en Dolores, en Guanajuato.
Con los planes desenmascarados, el cura Miguel Hidalgo decidió que el levantamiento planeado para octubre se adelantara a la madrugada del 16 de septiembre, iniciando así de manera formal la llamada lucha de independencia, proceso que buscó la libertad de lo que era conocido como la Nueva España.
“La Corregidora” murió el 2 de marzo de 1829 en la Ciudad de México, fue sepultada en el Convento de Santa Catarina y después exhumada para ser trasladada a la ciudad de Querétaro, junto a su esposo, Miguel Domínguez. Los restos de ambos se encuentran en el Panteón de Queretanos Ilustres.
Luego de leer la reseña, funcionarias de la administración pública municipal y el Coronel del Arma Blindada del Séptimo Regimiento Mecanizado de La Llave, Óscar Alfonso Zenteno Villagómez, montaron una Guardia de Honor a doña Josefa Ortiz de Domínguez. En el evento también hubo una banda de guerra, quien dirigió los honores a la bandera.
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