Aurelio Sigala Páez, titular de la Coordinación Estatal de Pueblos Indígenas en el estado de Querétaro, dijo que uno de los compromisos que se tienen para con los artesanos de la entidad, es la protección de los bordados que hacen alusión a su cosmovisión, y que son plasmados por este sector.
Mencionó que estos se deben proteger puesto que, representan la riqueza cultural del estado a través de los artistas que trabajan en textiles, barro, cerámica, sillar y una gran cantidad de materiales que se comercializan a diversas entidades del país e incluso del extranjero.
Declaró que, no solo se da con la iconografía, sino con otros elementos, mismos que a veces, quieren ser comercializado por empresas de gran tamaño e incluso foráneas, dejando en desventaja a quienes se dedican por décadas a esta labor que se reconocer en las zonas indígenas.
“Se debe trabajar con la iconografía, el bordado y la propia artesanía, es un tema que se va a atender a nivel del registro de marcas, el registro de la iconografía local, en Amealco se tienen más de 12 tipos de iconografía y bordados, particularmente lo más representativo está en San Ildefonso Tultepec”.
El funcionario, hizo énfasis en que, de manera particular, se ve más variedad de los bordados tomados de la naturaleza, en la comunidad de San Ildefonso Tultepec, Santiago Mexquititlán y Chitejé de Garabato.
Expuso que el trabajo detallado por las mujeres principalmente de estos pueblos, debe ser valorado, ya que lleva bordes que resaltan la cultura de México, y que, si bien pueden ser replicados por una máquina de coser, pierden su esencia cuando se analiza su corte industrial.