La autora del libro “Abrazar hasta el último aliento”, Miriam Israel, expresó que para aliviar el dolor físico y el dolor del alma, es necesario vivir el duelo conforme a las etapas que se tienen en la vida, estas pueden ir desde la pérdida de un ser querido, de una mascota o bien, de una infidelidad.

Durante la presentación de su autoría en las instalaciones de la Cámara Nacional del Comercio (Canaco), San Juan del Río, habló de la importancia de atender este tipo de necesidades que regularmente son ignoradas por las personas, al considerar que es común el sufrimiento en la vida cotidiana, ello, sin conocer las consecuencias que se generan, hasta desencadenar la propia enfermedad en algunos casos.

Ante una nutrida asistencia, recalcó que el duelo es una condición emocional que se da cuando se pasa por una pérdida definitiva de alguien o algo y que representaba mucho para la persona, de ahí que se derivan varias etapas, entre ellas; la negación, la rabia, la aceptación, la culpabilidad o la tristeza.

Aunque el promedio del duelo puede durar seis meses, depende de cada persona, pues esta fase no se puede acelerar ni retrasar, ya que tarda el tiempo en el que el familiar logre aceptar y asimilar el estado por el que está atravesando.

Mencionó que algunos duelos mal tratados emanaron de la pandemia por Covid-19, periodo en el cual no se dio la oportunidad de despedirse del ser querido en familia, por ello, a través de este libro, afirmó que se podrán encontrar algunas recomendaciones para sanar y liberar esa etapa de la vida que por varias familias se vivió.

La autora consideró que “todo duelo no trabajado es acumulado”, por ello afirmó que cada una de estas etapas, se explican en el libro de su autoría, esto con la finalidad de simplificar el entendimiento y la comprensión de las cinco fases del duelo.

Una de las recomendaciones que realizó la especialista para desahogar el dolor y sufrimiento emocional por aquel familiar que perdieron durante la emergencia sanitaria, es reunirse en familia y hablar de las experiencias y “de las cosas lindas que aprendieron de ese ser querido, pongan una fotografía si quieren, la intención es de despedirnos y de agradecer lo vivido”.