Es preocupante el alto consumo de drogas entre los jóvenes del estado, especialmente de aquellas sustancias químicas que generan un daño en la salud física y mental, y ante ello es necesario que el Gobierno Estatal atienda el tema que afecta principalmente a los menores de edad de comunidades, afirmó el Senador de la República por el estado de Querétaro, Gilberto Herrera Ruiz.
Refirió que en los recorridos que ha realizado por las diferentes zonas del estado ha observado esta problemática especialmente en jóvenes que asisten a los niveles escolares de secundaria y preparatoria. Asimismo, dijo que si bien anteriormente esta práctica era exclusiva de hombres, se ha detectado que mujeres menores de edad inician en el consumo de estas sustancias nocivas.
“Hay un alto consumo de drogas ya en nuestros jóvenes, como el cristal, cuestiones incluso ya químicas que hacen un gran daño (…). Están envenenando a nuestros muchachos y lo veo hasta en las sierra y ni siquiera en las cabeceras de Arroyo Seco, Jalpan, por mencionar algunas, lo estoy viendo incluso en comunidades alejadas donde ya está llegando este tema de drogas y del narcomenudeo y que es una responsabilidad del Gobierno Estatal el evitar eso”, comentó.
Al respecto, algunas autoridades auxiliares de San Juan del Río han mencionado en entrevistas que entre los principales problemas que aquejan a sus comunidades están el consumo de drogas, especialmente la droga sintética denominada como cristal. Ante esta situación, han reiterado en varias ocasiones que esta problemática deriva en las incidencias delictivas que ocurren en sus localidades, especialmente los robos.
Por otra parte, Herrera Ruiz que otro tema fundamental por atender es el narcomenudeo que existe en casi todas las zonas del estado, toda vez que la presencia de esta actividad ha sido uno de los detonantes para que los jóvenes inicien con el consumo de drogas. Afirmó que si bien se hacen las denuncias correspondientes, en la mayoría de los casos las autoridades competentes no actúan, dejando entrever, aseguró, que existe una protección hacía quienes realizan esta actividad.
“Vivencias mías, propias, de pedirle a un director que denuncie que en tal casita se esté vendiendo esa droga para los muchachos y ver que no se hace nada y que acaba siendo amenazado el director y que tiene que pedir su cambio a otro lugar por ello, de tal manera que veo un narcomenudeo que está protegido por las autoridades y eso es más preocupante todavía”, concluyó.