Cuando emitimos un voto a favor de cualquier persona que quiera representarnos en algún cargo público, es porque confiamos o al menos esperamos que las condiciones cambien a favor, creando mejores oportunidades para nuestras familias.
Sin embargo, no siempre es así, este año hemos sido testigos de cómo las cosas van en declive económicamente, como el costo de varios productos se han elevado de manera considerable, pero hay un tema en específico del que poco se ha hablado y que ha afectado a la clase trabajadora.
Ante el bajo crecimiento económico la recuperación del mercado laboral mexicano para este año nuevamente luce desolador, en este 2022 entró en vigor el nuevo modelo para calcular cómo se reparten las utilidades anuales de las empresas entre sus trabajadores, algo que sin duda afectó a las y los trabajadores, ya que se estipulo un límite para esta prestación, afectando considerablemente el bolsillo de los trabajadores.
Durante todo el año muchos trabajadores aguardan estas fechas para recibir una de las prestaciones más relevantes que deben ser entregadas durante el primer semestre, pero este 2022 hubo una gran desilusión cuando los montos reflejados de las utilidades no eran lo que esperaban.
Y es que en la nueva fracción VIII del artículo 127 de la Ley Federal del Trabajo (LFT), se contempló un límite para el pago de las utilidades en dos modalidades: la opción uno, tres meses de salario de la persona trabajadora y la opción dos: el promedio del PTU recibido en los últimos tres años, pero con la clara anotación de que se aplicará el monto que resulte más favorable al trabajador.
Esto sin duda limita por mucho los montos que se recibían con anterioridad, por lo que los trabajadores poco a poco externaron sus inconformidades y comenzaron a exigir una respuesta a las empresas, quienes explicaron a detalle las modificaciones a la Ley del Trabajo y la clara evidencia de que su bolsillo resentiría esta modificación.
Sí bien cada reforma es analizada y discutida, en esta ocasión no resulto ser favorecedora para los trabajadores, debido a las políticas laborales impulsadas por el gobierno federal.
Es necesario que como autoridades logremos ser empáticos con la situación que atraviesan las familias mexicanas, muchos de los trabajadores utilizan este recurso adicional para liquidar o mejorar la calidad de vida de sus familias, para alivianar la situación económica que dejó la pandemia.
Porque ellas y ellos son la fuerza económica de México, son esas mujeres y hombres que se levantan a cubrir turnos de 12 horas o más, los que hacen que la reactivación tras la pandemia sea una realidad, hoy debemos escuchar y ser la voz ante la defensa de sus necesidades.
*Diputada Federal PAN