Ante la crisis económica que atraviesa gente de comunidades que se quedó sin empleo a consecuencia de la pandemia por Covid-19, el consumo de nopal gratuito, extraído directamente de la penca, ha sido una opción para sobrevivir al limitado acceso a otro tipo de alimentos.
Jenny Leal Galván, subdelegada de la comunidad de La Magdalena, explicó que derivado de la emergencia sanitaria varias personas de esta comunidad se quedaron sin empleo, entre ellas gente que laboraba en comercios, empleadas domésticas y trabajadores de la construcción.
“Algunos de plano cerraron los negocios, también algunas mujeres que trabajaban como empleadas domésticas, pero ahora con los patrones en casa, pues ya no las requirieron, les dijeron que después verían de acuerdo a su economía, ya sería que las llamen o simplemente para darles las gracias, algunos albañiles, como parece que hay escasez de cemento y algunas casas de materiales están cerrando, pues también los descansaron, pero sin goce de sueldo”.
Manifestó que al no contar con ingresos económicos, las familias echan mano de lo que regala la tierra, en este caso de nopales, que por fortuna nunca faltan y se pueden preparar de distintas formas, incluso es posible consumirlos sin ningún otro ingrediente.
“Es un poco difícil, pero como dijo alguien en broma, es nuestra realidad que nos agarró la Cuaresma y la cuarentena, pero gracias a Dios nos tocó en tiempos de nopales. Algunos habitantes que les pregunto cómo estás, ocupan algo, nos dicen, pues aquí pasándola, con nopalitos asados, nopalitos en penca, nopales con chile o sin chile, nada más hervidos”.
Agregó que por fortuna a esta comunidad ya llegaron las primeras despensas que reparten el gobierno municipal y estatal, por lo que servirán para completar la necesidad alimentaria, aunque reconoce que no serán suficientes.