En la búsqueda del “sueño americano” los migrantes latinos sufren violencia, discriminación y múltiples redadas, aseguró Marcelo Cristino Juárez, quien decidió salir de Hidalgo, su estado natal, para cruzar la frontera, sin embargo, a su paso enfrentó múltiples agresiones de las autoridades de Estados Unidos.
El señor de ahora 42 años, relató que desde el 1999 empezó a ir Estados Unidos y vivió en Carolina del Norte, donde, por temporadas, se dedicó a lavar platos en restaurantes, o juntando pacas de alfalfa en el campo; años más tarde participó en un concurso de canto de donde obtuvo el segundo lugar, y ofreció algunas presentaciones locales.
Comentó que los problemas empezaron cuando las autoridades de aquel país, se dieron cuenta que circulaba con documentación falsa, que por su necesidad, se vio obligado a adquirir, debido a esto estuvo preso en dos ocasiones, acusándolo, entre otras cosas de dedicarse a falsificar identidades; sin embargo, sus abogados probaron que esto no era cierto.
“Se sufre bastante, uno como indocumentado compra los papeles para podernos identificar y yo compré unos documentos a unas personas que hacían ese trabajo, ahorita están presos, pero me acusaban de trabajar con ellos, pero no fue cierto, me llevaron preso y salí rápido, con fianzas porque mis abogados me defendieron y demostraron mi inocencia”.
En 2015 contrataron a Marcelo para amenizar a una supuesta fiesta para una quinceañera, sin saber que las autoridades de Estados Unidos le tendían una trampa para capturarlo, entonces, le dieron 30 meses de prisión, que concluyeron en febrero del presente año.
Su paso por este lugar, lo cuenta como estar en medio de una pesadilla, toda vez que vulneran los derechos humanos, no hay servicio médico, poca comida, violencia física y psicológica; incluso muerte de hispanos derivado de las condiciones en las que se encuentran.
“Hay mucha negligencia médica en las prisiones hacia los hispanos, a mí me tocó estar en la prisión del estado de Georgia. Me tocó ver tres defunciones por negligencia, nos gritan que regresemos a nuestro país, malditos mojados y que no regresemos”.
Manifestó que el tiempo que estuvo en prisión, se dio cuenta que el consulado de México dista mucho de estar al pendiente de los ciudadanos presos, y mejor autoridades de Centroamérica brindan atención a sus paisanos.
Hace apenas unas semanas, Marcelo Cristino Juárez llegó a México de nueva cuenta, y se quedó a vivir con una hermana en Tequisquiapan, en donde pretende retomar su carrera artística, por ello trabaja en su último material discográfico bajo el nombre de: Joskar Gutiérrez.
Por último, señaló que quiso dar a conocer su historia para que las autoridades estatales y nacionales hagan políticas que favorezcan a los migrantes y haya quien los proteja al caer en manos de la ley americana, sobre todo, para la defensa de sus derechos humanos.