La aprobación de la Guardia Nacional con un mando civil da confianza de que será una corporación con rostro social y actualizará la lucha por la seguridad, coincidieron el diputado local Roberto Cabrera Valencia y el vicario de la Diócesis, Martín Lara Becerril.
Cabrera Valencia adelantó que el tema deberá pasar por las legislatura locales, por lo que se iniciará el cabildeo para mantener el mando civil y el vicario confió en que esto permitirá que México “Avance por los caminos de paz, sostenido por esta nueva policía”.
El diputado local aseguró que al no ser una Guardia militarizada, se podría tener un modelo de seguridad que entregue resultados concretos, pero “Estaremos atentos porque pasará por el tamiz de los congreso de los estados, porque es una reforma constitucional, en el constituyente permanente y tendremos muy detallada la información y cuál será el punto de vista”, de manera que se iniciará el cabildeo legislativo.
Lara Becerril indicó que hay esperanza en que la Guardia Nacional no tenga un mando militar, porque “Todos sabemos lo que significa la milicia, que nos da una sensación de guerra y cuando es un mando civil nos da una sensación de confianza y así lo esperamos”.
“Esperamos que la nueva policía tenga un rostro civil, un rostro muy preocupado por la sociedad, un rostro social y que sea una policía que esté al servicio del pueblo, de la seguridad de las familias, de los niños, de los jóvenes. Que la consecuencia que tenga sea algo realmente muy positivo y que México avance por los caminos de paz, sostenido por este nuevo policía”.
Lara Becerril estimó que la Guardia Nacional implica actualizar a la policía, para eliminar todo riesgo de corrupción “Y hay que sumarnos a este esfuerzo para lograr la paz y para que todos vivamos en paz, cuando un pueblo está en paz prospera”.