Una de las tareas que ha emprendido la Secretaría de Desarrollo Agropecuario de San Juan del Río es el impulso para que las personas de las distintas zonas del municipio tengan en sus hogares huertos biointensivos y de esta forma garantizar la seguridad alimentaria de cada una de las familias, dio a conocer el titular de esta dependencia, Roberto Jiménez Salinas.
Señaló que se espera que durante esta segunda mitad del año se puedan concretar 200 huertos de este tipo en algunas comunidades y colonias, especialmente que se encuentran en la zona conurbada de la demarcación. De acuerdo con información compartida, el programa inició el año pasado con 16 huertos de este tipo.
Asimismo, se detalló que esta iniciativa nació como respuesta a diversas problemáticas, como la falta de agua para el riego de la siembra, baja fertilidad del suelo, presencia de plagas, enfermedades de los cultivos, así como la falta de acompañamiento, capacitación a productores y el incremento en el precio de los insumos como fertilizantes, abonos, herbicidas, insecticidas, entre otros.
“Seguimos promoviendo los huertos biointensivos que es algo muy importante para garantizar la seguridad alimentaria de las familias en la zona. Esperamos cubrir el resto del año con unos 200 huertos más, pareciera pocos, pero ayudan muchísimo (…). Esperemos que los productores se animen a tenerlos, sobre todo en las zonas conurbadas. Es importante tener un huerto en casa”, comentó.
Según la información compartida, el Sistema Integrado de Huerto Biointensivo incluye insumos como una geobolsa, una mochila aspersora eléctrica, 40 litros de microorganismos benéficos nativos, 25 kilos de harina de roca, una malla sombra, 25 variedades de semilla de hortalizas, una bomba de agua presurizada y un sistema de riego por goteo con 100 metros de cintilla.
Jiménez Salinas, explicó que dentro de estos huertos se pueden sembrar una gran variedad de alimentos, entre frutas, verduras y legumbres. Añadió que además de garantizar la seguridad alimentaria de las familias, estás pueden encontrar una fuente de ingresos, toda vez que pueden comercializar los productos que cosechan en sus hogares.
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“Un huerto biointensivo se refiere a que en un pequeño espacio puedas producir una enorme cantidad de alimentos. Una familia podría vivir perfectamente con 10 plantas de jitomate, por ejemplo, y les sobrarían. Pero si ellos deciden poner 50 plantas de jitomate, les sobraría para vender y la idea es esa, que produzcan mucho para que también en casa puedan vender a los vecinos, pero garantizar primero lo de ellos”, concluyó.