El vocero organizacional, Rafael López González, manifestó que, en el análisis numérico de Covid-19 la tercera ola del fenómeno continúa imparable en su ascenso, llegando a velocidades sin precedente.
Mostró que en sólo 43 días la entidad alcanzó los mismos casos que el año anterior llevó seis meses, lo cual, aseguró, demuestra el efecto que tiene la variante Delta sobre los indicadores, y que “no se detendrá hasta que no entiendas que ya no estamos en dónde estábamos antes”.
Expuso cómo la población queretana se encuentra frente al periodo con mayor aceleración de toda pandemia, pues nunca había durado tanto un incremento en velocidad como ahora, teniendo como resultado que, al aumentar la cadena de contagios, también se eleva la hospitalización, que pasó de 96 el día 22 de julio a 201 el 5 de agosto, y en el mismo periodo las unidades de cuidados intensivos pasaron de 26 a 61 camas ocupadas y los fallecimientos de 31 a 61.
Destacó que, aunque las métricas estatales puedan mostrar cierto grado de capacidad hospitalaria en el estado, no se debe considerar que esa capacidad estará presente en todos los hospitales, pues, hay ya hospitales donde no existe capacidad para entender a más pacientes.
Afirmó que en el estado los hospitales pasan por una situación muy complicada que impacta la respuesta médica hacia quienes se enferman; adelantó a quienes hoy se contagien y requieran atención hospitalaria que podrían enfrentar situaciones angustiantes al no haber espacios para atenderse o no encontrar oxígeno.
Por lo anterior llamó a controlar la pandemia desde lo individual ya que a cada quien corresponde cómo terminará este año y cómo comenzará el siguiente.
El vocero informó que a partir de la emisión del próximo jueves la vocería compartirá información oficial para que la población esté coordinada con el gobierno e instituciones educativas en el reto de que niñas, niños y adolescentes vuelvan de forma presencial a las aulas.