Claudia Blas Blas, es una artesana de 65 años que vive en el barrio de La Loma de los Blas en la comunidad de San Ildefonso Tultepec, Amealco de Bonfil, unas de las zonas donde más de reciente el frio durante el periodo invernal, por lo que tienen que recurrir a prácticas para mantenerse a una temperatura estable.

La señora comentó que desde la tarde y durante la madrugada, el aire helado hace estruendos en las ventanas, condición que origina que su vivienda se sienta más fría, por ello su familia y ella, en ocasiones sacan las cobijas al sol para que calienten y en la noche las cubran mejor.

Relató que en un cuarto de aproximadamente seis por cuatro metros viven un total de seis personas, entre ellos dos menores que le ayudan a hacer actividades del campo, como el pastoreo, y por las mañanas desde las 10:00 salen a recibir a los rayos solares tras las intensas horas de heladas.

“El aire se siente muy helado, luego pega en las ventanas y puertas por eso sacamos en las mañanas a tender las cobijas para que en la noche que las metemos nos puedan calentar más. Aquí el frio es desde noviembre y se calma hasta febrero, ahorita ya hubo algunas heladas, pero nos dijeron que vienen peores”.

Platicó que las condiciones climáticas que se conjuntan con las necesidades que tiene, ya que anteriormente se dedicaba a bordar y a hacer muñecas tradicionales, las cuales vendía en algunos sitios de la capital del estado de Querétaro, México y en la caseta de Palmillas, sin embargo, desde junio el temor a contagiarse de Covid-19 la invadió y dejó de hacer esta actividad.

Por lo anterior, mencionó que ahora solo vive de lo que el campo le dejó en las últimas cosechas, esperando que pronto pueda reanudar su trabajo comercial, pero sobre todo con la fe en que el frio no les afecte en cuanto a su salud.