Por cerca de 39 años, la familia Chávez Juárez, originaria del Barrio de San Isidro, elabora pesebres navideños, hechos de cartonería y madera, cada artesanía producida es pieza única que ha formado parte del tradicional Nacimiento Navideño en cientos de hogares de familias sanjuanenses.
Esta labor de diseñar y elaborar pesebres inició por inquietud del señor, Juan Chávez Castillo, de 80 años de edad, explica que ha sido comerciante gran parte de su vida, por lo que anduvo en ferias que se realizaban en todo el país, donde encontró este tipo de productos que, en un inicio, compraba para revender, pero con el tiempo se decidió a elaborarlos de madera y cartón.
Don Juan y su esposa, Aurelia Juárez Durán (q. e. p. d.), formaron parte del primer tianguis navideño que se creó en el mercado Reforma, sitio donde ella acudía a vender los pesebres, pero debido a que no eran locatarios, sólo estuvieron por algunos años.
En la avenida Álvaro Obregón 44 ofrecen los pesebres desde hace 18 años, actividad que no han dejado, debido a que se convirtió en parte de la tradición familiar en la que participan los seis hijos.
En ese sitio mantienen la venta de octubre y hasta el 24 de diciembre, día en que incluso durante la noche han tenido gente que acude a buscar esta artesanía, que empiezan a elaborar medio año antes.
Nunca han contabilizado la cantidad de pesebres que producen cada año, simplemente los elaboran y conforme se van vendiendo hacen más, pues consideran esta actividad como parte de la herencia familiar.
Debido a que no usan patrones específicos, cada pesebre es único en tamaño y forma, situación que los convierte en piezas únicas que cada año forman parte del tradicional Nacimiento que lleva el espíritu de la Navidad a los hogares mexicanos.