Un grupo de 31 docentes jubilados de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) denunció que fueron expulsados del Sindicato Único de Trabajadores de la institución (SUAPAUAQ) debido a su inconformidad por el cobro de una doble cuota sindical.
Señalaron que el cobro se ha dado a pesar de que previamente se les había garantizado un acuerdo en el que no se les haría tal descuento de su nómina, pues interpusieron un recurso de amparo para externar su inconformidad con el pago de dicha cuota extraordinaria que se votó, desde su punto de vista, de manera discrecional en asamblea.
Los docentes expulsados refirieron que luego de haber externado su inconformidad con el pago de dicha cuota, la autoridad sindical y los inconformes firmaron un convenio “de buena fe, que establece que si hubiere incumplimiento de una de las partes, regresarían al ámbito de la instancia laboral, manteniendo a salvo los derechos de los demandantes”.
Además, sostuvieron que con la expulsión del sindicato les privan de su derecho al seguro de vida, cuya cuota habían estado cubriendo. Entre los quejosos se encuentra una proporción importante de personas de la tercera edad.
“Nos afecta el doble cobro de la cuota, pero mucho más que nos hayan quitado el seguro de vida. Tenemos compañeros con cáncer, con enfermedades crónico degenerativas, es peligroso porque ¿qué nos va a amparar o va a amparar a la familia?”, señaló Cristina Rodríguez Montoro.
Acusaron que ha habido opacidad respecto al monto total de la recaudación y que incluso solicitaron la información a través de la Plataforma Nacional de Transparencia, pero que no obtuvieron respuesta.
Llamaron a las autoridades sindicales, en específico al secretario general, Ricardo Chaparro, a reincorporar a los 31 docentes jubilados expulsados del SUPAUAQ, pues de acuerdo con los quejosos, esta acción no corresponde a ninguno de los motivos de expulsión establecidos en los estatutos generales del sindicato y tampoco se llevó a cabo ninguno de los procesos establecidos para expulsar a miembros del gremio.
“No es un capricho, no nos estamos negando a pagar, claro que queremos, pero lo que es justo y lo que se debe de pagar, si el señor Chaparro no acudió a las juntas de avenencia con el abogado anterior para poder subsanar la deuda que se tenía”, aseguró Rosa María Vázquez Cabrera, una de las docentes expulsadas.
Cristina Cabrera Muñoz refirió que los miembros expulsados del SUPAUAQ han recibido el apoyo de los compañeros sindicalizados que no han sido afectados de manera directa por estas acciones.
