La contaminación acústica en el municipio de San Juan del Ríoes un problema que va en incremento, debido a la falta deaplicación de la Ley, aseveró Miguel Ángel Zavala Robles,ecologista e investigador de la localidad, al detallar que laOrganización Mundial de la Salud (OMS) indica que son 30 losdecibeles permitidos en la noche para dormir, mientras para quepara el día se recomiendan 63, sin embargo, estas disposiciones sesobrepasan en esta demarcación.
Sostuvo que hay zonas en la parte sur del municipio donde losdecibeles se encuentran por encima de los 100, tal es el caso delas inmediaciones de una conocida empresa papelera a escasosmetros del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), dondeademás, dijo, hay zonas habitacionales y escuelas de todos losniveles provocando afectaciones de salud.
“Ahora tenemos una empresa que puso una planta jetpara generación eléctrica e iniciamos el estudio para demostrarque provoca contaminación importante en la zona. El problema de lacontaminación por el ruido es uno de los más grande que enfrentala humanidad”.
El ambientalista explicó que el problema en la zona centro sepresenta sobre todo en los establecimientos como pollerías,zapaterías, farmacias y créditos donde se les permite sacar unabocina e incluso botargas para hacerse promoción sin revisar elnivel del audio con el que trabajan.
“Ahora ya hasta sacan sus bocinas y animaciones para hacersepublicidad. Esto implica que no se ha hecho nada por la autoridadpara la regulación del sonido”.
Precisó que la autoridad municipal ha sido omisa en los dañosque se pudieran generar a partir de los altos índices de sonidoque se manejan en los sectores productivos, dejando de lado lavoluntad política para frenar estos actos.
Zavala Robles, puntualizó que hay enfermedades psicosomáticasque atañen a la población, derivado de la contaminaciónacústica, como el estrés, la esquizofrenia, tensión, enojo yfalta de sueño.