Agricultores de los ejidos Tuna Manza y Perales solicitaron la intervención de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), delegación Querétaro, para la devolución de su dinero, tras ser fraudados por una empresa comercializadora encargada de desarrollar, seleccionar y empaquetar semilla de chía color negra proveniente de Guadalajara, promovida por la dependencia federal para la innovación del campo agrícola en la región.
A nombre de los productores defraudados, habló el comisariado ejidal de Tuna Manza y Perales, J. Remedios Márquez López y Roque Rivera Ramírez, respectivamente, quienes expusieron que por lo menos hay 51 hectáreas de semilla de chía color negra dañada en ambos ejidos y sin la aparición del representante legal de la empresa que se interesó en la producción, de nombre Juan Carlos Soto Hernández, así como tampoco de autoridades de la Sagarpa, quienes promovieron este tipo de cultivos y a la empresa “fantasma”.
“Fueron 45 hectáreas y 12 productores de Tuna Manza los defraudados, estoy bastante molesto porque se aportaron dos mil 800 pesos por cada hectárea, realmente no tenemos ni maíz, ni pastura para los animales, no nos dan Procampo y que va a pasar con eso, este contrato se celebró el 16 de junio del año pasado, aquí está el pagaré del dinero, quiero que le den prioridad a este problema porque es afectación para las familias de los productores de Tuna Manza”, comentó, Márquez López.
El comisariado ejidal de Perales dijo que por esta situación, y ante la urgencia económica de los afectados, es necesario que intervenga la Sagarpa o la Secretaría de Desarrollo Agropecuario (Sedea), para activar programas de apoyo enfocados a los productores defraudados por la nula respuesta de la dependencia federal impulsora del proyecto innovador del campo, quien hasta el momento no se hace presente en ambos ejidos para conocer las condiciones de la tierra.
En recorrido en el lugar de las siembras, Rivera Ramírez afirmó que incluso la semilla de chía color negra se encuentra sumamente deteriorada por las condiciones climatológicas que en las últimas semanas se han tenido, por lo que al ser un cultivo innovador desconocen el proceso de la cosecha.
Una de las preocupaciones de ambos comisariados ejidales, es la preparación de la tierra para el próximo ciclo agrícola primavera-verano, labores que deben empezar a realizarse mediante el “barbecheo”, pero con la producción de semilla de chía negra, los trabajos se ven imposibilitados para ello.
Ambas autoridades ejidales, y los productores defraudados, acreditaron con documentación los pagos que realizaron a la empresa “fantasma”, con el aval de la Sagarpa para dichos fines agrícolas, por esta razón, su petición también la extendieron al gobierno municipal a efecto de recibir apoyo legal.