Para el profesor Arturo Méndez del Río, la profesión de la educación es uno de los más grandes retos que se tienen, al considerar que son distintas necesidades las que existen no solo en las aulas sino al exterior de las escuelas.

Este 26 de junio se conmemora el Día del Pedagogo y en este sentido, el docente consideró que existen grandes retos por atender en la educación, pero pese a ello, quienes se dedican a dicha labor, lo hacer con gran entusiasmo, dedicación y entrega por el futuro de México, creando no solo profesionistas sino buenas personas con valores humanos.

“Tengo 16 años frente a grupo, tengo 16 años de servicio activo y todos estos años han sido en primaria, los retos más grandes que se llegan a tener y no solamente ahora sino que desde que comencé la profesión pues es básicamente el apoyo de padres de familia, ya que el tiempo que se da en el salón de clases no es suficiente para cubrir todo lo que viene en nuestros planes y programas de estudio, en ocasiones se llega a dejar alguna tarea, desafortunadamente en ocasiones, algunos, no voy a generalizar pero hay padres de familia que no aportan en ello, ya sea en material o actividad que se tenga que realizar al interior de la escuela”, comentó.

La labor que realiza, consideró que es esencial para construir las bases de una buena sociedad, pero sin el apoyo de los padres de familia, aseguró que poco se puede avanzar al respecto, dado que el impulso no solo se hace desde los salones de clases sino desde el hogar.

A su consideración, otra de las necesidades que hacen falta en la educación es la asignación de más recurso para las escuelas, con el fin de que las instituciones públicas puedan estar en mejores condiciones, de tal manera que los estudiantes disfruten de acudir a recibir educación.

“Algunas necesidades quizá muy básicas, serían que las escuelas están dotadas de la mayoría de los materiales, ciertamente en una escuela pública y se supone que el gobierno debería de aportar un ocho por ciento de los ingresos para la educación y pues la verdad muy pocos estados están en ese rango, la mayoría por el rango del cinco o seis por ciento, algunos hasta el cuatro por ciento de ingresos a la educación y eso repercute en los padres de familia”.

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Por lo que pese a todas esas carencias que explicó, exhortó a los padres de familia a participar en la educación de los estudiantes, toda vez que consideró partir desde el hogar la educación de cada uno de los niños.

“Pienso que el oficio de docente es básico para cualquier sociedad, nosotros estamos a cargo de crear esos futuros ingenieros, arquitectos, doctores, sin fin de profesiones, o bien, oficios, pues en muchas ocasiones deciden ser mecánicos, soldadores, pero al final tienen que saber matemáticas, entonces ciertamente el docente tiene una gran responsabilidad y compromiso para impulsar a los alumno a desarrollar sus capacidades”.