Con fogatas hacen frente al intenso frío

Martha además se dedica a la venta de artesanías textiles en el centro de Amealco de Bonfil

Dolores Martínez|El Sol de San Juan del Río

  · lunes 4 de enero de 2021

Para mantenerse cálidos recurren además a tomar infusiones con hierbas del entorno|Fotos: Constanza Escamilla|El Sol de San Juan del Río

En el barrio de Xajay, en San Ildefonso Tultepec, una de las maneras en que las familias logran ahuyentar al frío, es con fogatas en sus hogares y pasar lapsos de entre 30 minutos y una hora frente a ellas, relató Martha Pascual García, de 52 años, habitante de esta zona, quien aseguró que el denso bosque y humedad ocasionan un clima sumamente gélido.

Una fogata es la mejor aliada en esta temporada invernal. / Constanza Escamilla.

Comentó que los estragos del frío se resienten, sobre todo en las partes más altas de esta localidad, como en su casa, la cual es de lámina sobrepuesta con tabiques, donde desde noviembre hasta finales de enero caen las peores heladas, ocasionando resfriados en los pobladores.

Sus prendas abrigadoras las ponen al sol para que en la noche les brinden cobijo. / Constanza Escamilla.

Dijo que una de las prácticas que hacen en este periodo es ir por leña al bosque, y en las tardes encienden una fogata adentro de su casa, ahí se sientan por lo menos unas siete personas miembros de su familia, toman té de toronjil, canela y a veces un café, con la finalidad que su organismo también permanezca cálido.

Su vivienda se encuentra en una de las zonas más apartadas de Amealco. / Constanza Escamilla

“Las mujeres usamos faldas con calcetas abajo, cuando nos ponemos en la fogata nos sentamos para platicar sobre muchas cosas, o solo recordar nuestra infancia, esto siempre lo hemos hecho, los niños y jóvenes toman calor como en media hora, pero los abuelitos de más de 60 años se quedan ahí hasta por una hora”.

La mayor parte del día sus hijos permanecen en casa para resguardarse del frío. / Constanza Escamilla.

Otra de las complicaciones que deja esta temporada es la presencia de enfermedades respiratorias que a veces se aseveran debido a que las heladas no bajan, condición que vulnera, dijo, principalmente a los niños y adultos mayores, siendo este ultimo sector el que sufre de dolor en huesos y articulaciones.

Martha Pascual García es una mujer otomí que padece de la intensidad del frío. / Constanza Escamilla.