Uno de los principales atractivos que tiene la zona indígena de San Ildefonso Tultepec, es el conocimiento de su herbolaria a través de las mujeres que componen la cooperativa Dyxaí, quienes ofrecen un recorrido guiado para los turistas diariamente, justo en las inmediaciones del barrio de El Bothé.
Así lo dio a conocer María Isabel Pascual García, integrante de esta agrupación, al referir que ya comenzaron con los paseos 2023, los cuales buscan seguir impactando a los visitantes al Pueblo Mágico de Amealco de Bonfil, en donde comparten lo que han heredado durante décadas.
Mencionó que la experiencia comienza con un exquisito y calientito té de hierbas que, se elabora en una olla de barro, y que sus aromas transmiten tranquilidad para dar paso a los conocimientos y manipulación de las hierbas de la región, cuya descendencia forma parte de su cosmovisión.
“Es una experiencia diferente, donde a través de las hierbas, nos transportamos a nuestros ancestros, cuando las abuelas curaban con tecitos, con amor y con toda la fe para sentirnos mejor. Lo que nosotros recomendamos es reservar cuando vienen en grupos, porque así nos preparamos mejor para recibirlos”.
Señaló que, los grupos de turistas viajeros, familias e incluso estudiantes pueden hacer la reservación al número 448 111 84 31, en donde les podrán dar mayor información sobre cómo se componen las visitas, ya que, hay otras facetas que pueden ir contemplando para exponerlas.
“Tenemos nuestras redes sociales en las que, las personas se podrán dar cuenta de nuestro trabajo, compartimos también algunos de los productos que hemos creado a lo largo del tiempo como son las tinturas, los tratamientos para el cabello, otras infusiones y los jabones que atienden a muchas cosas, todo natural”.
MUÑECAS
Isabel Pascual relató que hay otra frase que ofrecen en este lugar y que, es la elaboración de las muñecas Lele y Dontxu, ahí cada visitante va personalizando su muñeca, tomando en cuenta las piezas que, detalladamente van bordando las artesanas.
Mencionó que a través de esta práctica, los visitantes se dan una idea del trabajo meticuloso que compone a las muñecas que le han dado la vuelta al mundo, toda vez que, de esta manera buscan hacer conciencia sobre evitar el regateo cuando las vean en diferentes lugares del estado.