El 2017 concluyó con la detección de 38 tomas clandestinas en el municipio de San Juan del Río; mientras que 2018 inició con la localización de dos, el desmantelamiento de tres lugares para almacenaje de combustible, y el aseguramiento de al menos siete vehículos que transportaban hidrocarburo ilegal; entre estos hechos destaca el temor entre la población y las constantes denuncias por olor a combustible, fugas y explosiones.
San Juan del Río se ha convertido, por su ubicación y el cruce de 660 kilómetros de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) por su territorio, en el municipio que encabeza la sustracción ilegal de combustible en el estado, lo que se refleja en el incremento de carpetas de investigación ante la Procuraduría General de la República, que pasó de aproximadamente 130 en el año 2016 a más de 200 en 2017 por distintos hechos relacionados al robo de hidrocarburo.
Dentro de estos hechos resalta la frecuencia de derrames y contingencias, entre las más graves del año pasado sobresale la registrada el 12 de julio, cuando derivado de una toma clandestina, se registró una grave fuga de combustible en la colonia Los Rocíos, que originó la evacuación de por lo menos 500 personas, y la activación del Plan DNIII del Ejército mexicano.
Las afectaciones en tierras de cultivo donde se han presentado derrames de hidrocarburo que las han dejado inutilizables para la siembra, es otra de las secuelas de la sustracción ilegal de combustible, que además ha dejado sin sustento a decenas de familias que se dedican al campo.
Otra situación grave registrada durante 2017 fue la ubicación de una manguera de varios metros de extensión conectada a un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex). De este hecho resalta que la toma clandestina de hidrocarburos en la periferia de la planta de rebombeo perteneciente a Pemex, donde había el antecedente de acontecimientos similares.
El primer día de noviembre fue la cuarta ocasión que se da el ilícito en la estación de rebombeo de Paseos de Xhosdá, donde a unos cuantos metros estaba iniciada la construcción de un túnel para la extracción del hidrocarburo, hubo la detención de ocho personas, además fue asegurado un microbús color blanco con varios contenedores al interior, dos vehículos tipo pipa en color azul, un vehículo tipo tanque en color blanco con azul, una camioneta Chevrolet, color blanco, una camioneta color negro, Dodge Ram, y una camioneta tipo Van, color blanco.
Los “chupaductos” han originado además accidentes que han puesto en riesgo a la población como fue el caso registrado en agosto del año pasado, donde una camioneta cargada con aproximadamente dos mil litros de gasolina estalló en llamas en el momento en que ingresaba a un predio ubicado en calle Lobo, de la colonia Granjas Banthí, en las inmediaciones de un jardín de niños.
En febrero ocurrió una fuerte explosión en una parcela en la comunidad de Santa Matilde, se trató de una camioneta y dos cilindros con capacidad de mil 100 litros cada uno, una toma clandestina abierta y una manguera.
Hechos similares se han registrado en puntos como Santa Cruz Nieto, Santa Cruz Escandón, y en la colonia Las Águilas, prácticamente el riesgo se ha extendido por todo el municipio.
El peligro por la presencia de bodegas para el almacenaje de combustible ilegal se ha incrementado, provocando contingencias y alerta entre la población, que recientemente ha realizado constantes denuncias a través de distintos medios y redes sociales, para pedir la intervención de las autoridades ante la sospecha de que en las inmediaciones de sus viviendas se percibe fuerte olor a combustible.
Es el caso reciente de la comunidad Loma Linda, donde tras la denuncia de los ciudadanos se detuvo a dos sujetos, además se localizó una toma clandestina y un predio en el que se presume almacenaban hidrocarburo extraído de forma ilegal, y el de San Pedro Ahuacatlán, donde incluso se registró una explosión en el drenaje, luego que desde una vivienda se vertió combustible que se almacenaba en el inmueble, con la intención de deshacerse de él ante la alerta que causaron los fuertes olores.
Los puntos donde más tomas clandestinas se registran en San Juan del Río son: Palmillas, Cazadero, Los Rocíos, Santa Bárbara la Cueva, Santa Matilde, Banthí, Senegal de las Palomas, La Estancia, Loma Linda y El Rosario, mientras que el almacenaje de combustible ilegal se ha extendido por todo el municipio.
Por hechos relacionados al robo de hidrocarburo, durante el año 2017 fueron asegurados 10 tractocamiones, 11 semiremolques y 41 vehículos particulares.
Autoridades estatales y municipales han coincidido en la necesidad de establecer acciones en coordinación con Pemex para abatir el robo de combustible, sin embargo, los números en materia de denuncias y detección de tomas clandestinas lejos de disminuir van en incremento.
