Con mirada nostálgica al recordar los bailes, la música y principalmente la armonía y hermandad que se vive durante las ceremonias de bienvenida al sol, a propósito de la llegada de la primavera, Sandra Domínguez Laso, integrante de la asociación civil Maxei platicó a El Sol de San Juan del Río, que si bien las reuniones y fiesta en torno al equinoccio, siempre serán emocionantes, hoy lo más importante es comprender la esencia del momento y con ello dar puerta a una ceremonia más espiritual y familiar.
Explicó que durante el año se tienen dos equinoccios y dos solsticios, momentos que marcan etapas trascendentales durante el año, y detalló que durante el equinoccio de primavera, se hace una bienvenida al sol y una recepción con un saludo a los rumbos y al astro rey; para ello destacó que regularmente se acude a templos prehispánicos o sitios considerados como energéticos como es la pirámide del Barrio de la Cruz para el caso de San Juan del Río.
No obstante recalcó que atendiendo al panorama actual por pandemia, lo importante es entender que el momento se trata, más de un momento de cambio e introspección, lo cual se puede hacer desde casa, pues la idea es que las personas reciban esa energía de la primavera en el espíritu y en la persona, por lo que no es necesario acudir a un lugar de rito.
Mostrando su profundo arraigo a las costumbres prehispánicas, explicó que desde tiempos milenarios, el cambio de invierno a primavera se ha considerado un periodo importante, porque se trata de una etapa de despertar, tanto de la conciencia de las personas, como el despertar de la naturaleza.
Reiteró que la recepción del equinoccio, es un momento ideal para depurar aquellos pensamientos negativos que tenemos y que se acompaña de la oportunidad para deshacernos de aquellos objetos que están adentro de los hogares y que por su carga emotiva, pueda provocar un estancamiento de energía, por ello aseguró que la entrada de la primavera, es ideal para renovarnos los pensamientos y sacar todos los objetos innecesarios de casa.
Además nos platicó sobre algunas acciones simples para potenciar el cambio de energía, “puedes salir a tu patio o a tu azotea y recibir esos rayos del sol para tomar energía del universo, puedes hacer meditaciones, depurar todo con un baño de agua de luna, esto es, poner un poco de agua bajo la luna y al otro día darte un baño con ella, esto sirve para depurar o limpiarte, igual si tienes cuarzos o piedras, puedes lavarlas con esta agua y dejarlas del 20 al 21 para que se purifiquen y te ayuden a proteger y darte energía” señaló.
Por último, nos contó que de forma personal, ella y su familia, recibirán este periodo desde su casa, con un temazcal familiar, cumpliendo con las medidas de distanciamiento social; “haremos la depuración, tocaremos el caracol, los tambores y la sonaja, vamos a saludar a los rumbos, hacer música para mover la energía y sobre todo, agradecer que estamos en familia, la idea es no salir a un lugar a tomarla, sino agradecer lo que tenemos” concluyó.