La situación del campo en 2023 para Pedro Escobedo se avizora complicada, toda vez que se pronostica la presencia de una sequía similar a la del año pasado, lo que provocaría que varias de las hectáreas no puedan ser sembradas en el que se considera el municipio con mayor producción agrícola de la entidad, dio a conocer el presidente de Unión de Organizaciones del Campo del Estado de Querétaro (Unoceq), Francisco Perrusquía Nieves.
Recordó que el año anterior, más del 55 por ciento de las más de 5 mil hectáreas de temporal con las que cuenta la demarcación de Pedro Escobedo no fueron sembradas por debido a la falta de lluvias, lo que representó un impacto económico a los productores y también en la producción de alimentos. Añadió que la sequía vista en 2022 fue la más severa de los últimos años.
“Seguimos con problemas, derivados de la sequía muy prolongada que tuvimos y no registrada esta durante mucho tiempo atrás, no se había tenido esto. Tenemos el problema, realmente, de las presas. Las dos principales presas de la región sin agua y muchos bordos, que sirven de abrevadero para el ganado en las comunidades de temporal, sin agua. Creo que es un reto importante”, comentó.
Indicó que esta situación representa un problema que tendrán que afrontar los productores de la región, pero también las autoridades de los tres niveles de gobiernos, quienes deberán de generar una sinergia para apoyar a los productores del sector primario. En ese sentido, puntualizó que el Gobierno Federal es quien se ha olvidado por completo del campo.
Añadió que, ante el escenario crítico, quienes más sufren son los productores; pero también, dijo, la situación afecta a las familias de las urbes, a quienes llegan más caros los productos debido a la escasez que existe.
“Son condiciones complicadas, derivado de este abandono que ha hecho el Gobierno Federal al campo. Sigue con este problema serio, sin dar la cara, sin resolver nada, sin atender nada y pues esto realmente preocupa porque quien sufre, lo hemos reiterado muchas veces, nosotros sí ciertamente porque nuestros ingresos bajan, pero también (…) los consumidores de las grandes ciudades. Los alimentos les están llegando más escasos y desde luego mucho más caros”, mencionó.
Finalmente, comentó que esto se une al aumento de los precios de los diversos insumos que los productores emplean para realizar sus tareas. Dijo que estas situaciones serán a las que se enfrentarán los agricultores escobedenses, quienes deberán de destinar múltiples esfuerzos para salir abantes.