La Comisión de Hacienda de la legislatura local aprobó desincorporar un predio de más de cuatro mil 551 metros cuadrados del municipio de San Juan del Río, para que el ayuntamiento lo permute por otro espacio y pague el daño a dos particulares, a quienes les invadió un terreno durante la construcción de una avenida en 2002.
En la sesión de trabajo, la presidenta de la Comisión, diputada Norma Mejía Lira, explicó que las ciudadanas María Teresa Marcela Cázares Rosas y María Teresa Marcela Peralta Cázares donaron una fracción de un predio de 23 mil 853.59 metros cuadrados para que el municipio construyera la avenida Luis Donaldo Colosio hace 16 años.
Sin embargo, el gobierno municipal de San Juan del Río invadió cuatro mil 551.14 metros cuadrados más de lo donado y ahora debe reparar el daño que le causó a las particulares, mediante la permuta de una fracción de idéntica superficie que deberá entregar a las dos ciudadanas.
“Es necesario que el municipio repare el daño que causó en perjuicio de particulares, permutándoles una fracción de idéntica superficie, por la que indebidamente invadió con la vialidad que se encuentra en el mismo lugar, justo enfrente, puesto que se trata del espacio donde se debió haber construido la avenida siguiendo el trazo original que consta en los instrumentos públicos que plasman el proyecto”, declaró la legisladora.
En la misma sesión, se aprobó por unanimidad un decreto por el que se autoriza al municipio de Amealco a desincorporar y enajenar, a título gratuito, un predio de 13 mil 187.50 metros cuadrados, a favor de los Servicios de Salud del Estado de Querétaro (SESEQ).
Con la desincorporación, se brinda certeza jurídica en el patrimonio público, porque se trata del predio en el que se ubica el Centro de Salud con Servicios Ampliados y Medicina Tradicional, que se construyó en Amealco en 2013, con 74 millones de pesos de los gobiernos federal, estatal y municipal.
La Comisión rechazó una iniciativa de decreto que autorizaba un nuevo plazo al Ejecutivo estatal, para enajenar un inmueble a favor de la Universidad Icel, pero en el que no se puede construir porque por el predio pasan seis líneas de media tensión y cinco líneas de alta tensión eléctrica, además de líneas de gas licuado.
De acuerdo con la opinión técnica de la Comisión Federal de Electricidad, “Es en extremo difícil la reubicación de las líneas de alta tensión, de manera que es “imposible” otorgar un nuevo plazo para construir la universidad.
Al respecto, el diputado local Antonio Zapata se pronunció por no ratificar la donación, porque es prácticamente imposible que se pueda ejecutar una obra en beneficio de la comunidad en esa zona, aunque si se hacen mejoras, se podría solicitar de nuevo la desincorporación.