Amor por las flores en El organal

Dolores

  · martes 5 de diciembre de 2017

Las rosas necesitan ser consentidas para que crezcan bellas y radiantes en su color.Foto: Víctor Jiménez

Las rosas que se cultivan en la comunidad de El Organal, SanJuan del Río, reciben todos los cuidados y un trabajo arduo de 24horas para conservar su belleza, frescura y textura; y que de estemodo sean comercializadas o distribuidas en distintos estados de laRepública Mexicana.

Ismael Martínez Martínez, floricultor desde hace más de 18años, forma parte de la segunda generación de productores de estacomunidad, en la que tiene un inmenso vivero desde poco más de 22años, cuando sus padres le enseñaron a trabajar la tierra y verla hermosura que se desprende de cada rosal que se planta.

En entrevista, el señor refirió que al ser esta localidad laprincipal productora de rosas en el Estado de Querétaro, lacompetencia es mucha, ya que hay decenas de hectáreas que sededican a lo mismo; sin embargo, la particularidad de su productoconsiste en estar cambiando constantemente los colores en losinjertos para sus viveros luzcan de multicolores, y salgan de lamonotonía de tonalidades básicas como el rojo, amarillo, blanco yrosa.

“Nosotros tenemos variedad en colores, porque hay variedad deempresas que solo se van por cultivar los colores más comerciales,a nosotros nos gusta dar un extra a los clientes para que noscompren, pero también que nos recomienden”.

Mencionó que derivado de esta innovación en la gama decolores, ahora tienen colores dúo, fiusha, naranja, y diversosdegradados de tonos básicos, mismo que se han obtenido por laimplementación de injertos que mejoran la producción, y por lotanto son del gusto de la gente.

El floricultor expresó que los gustos han variado en losúltimos años, antes los revendedores o personas que comprabanestas flores para sus eventos, buscaban una uniformidad para teñirde naturaleza sus espacios, pero ahora buscan tener lugares llenosde colores radiantes que les brinden alegría y frescura en fechasimportantes.

En cuanto a los retos y problemáticas que enfrenta este sectorproductivo, precisó que son los cambios radicales de clima comolos que se dan en San Juan del Río, al presentarse heladas ofuertes temporadas de calor, y para atender a estas necesidades,hay personas que llegan pernoctar en los viveros para que las rosasse desarrollen con estabilidad.

“El invierno hace que la producción se disminuya hasta en un40 por ciento y si vemos se nota la reducción incluso hasta en lasganancias, por eso en esta temporada también se sube el precio porgruesa”.

En cuanto las temporadas de mayor venta para los floricultoresde El Organal, dijo que es el 10 de mayo por el día de las madres,el 14 de febrero y el 12 de diciembre por el festejo de lasLupitas, fechas para las que se preparan para sacar lo más que sepueda la producción.

Por otra parte, Crescencio Chávez Cruz, trabajador de estevivero, se encuentra en el área de ‘juntado’, en donde lleganlas flores cortadas para ser seleccionadas por colores y formarlaspor 72 rosas, que equivale a una gruesa, ahí le ayuda FabiolaGarcía Olalde, quien se alegra su jornada laboral que inicia a lasnueve de la mañana escuchando las canciones gruperas más sonadasen su radio de pilas.

En este sitio con olor a flores vivas, también se reúnen paracomer, refrescarse y platicar cuando el sol es muy fuerte, porquela sombra de una lona gruesa les cobija por momentos que se tornanmuy agradables.

La señora Fabiola enfatizó que espera que las siguientesgeneraciones sigan haciendo este trabajo que llena de alegría aseres queridos, o bien, que enamora a las parejas, ya que una rosasiempre será motivo de afecto y sinceridad.