Con la intención de buscar lugares fuera del continente para ofertar la riqueza del municipio de Américo de Bonfil, se llevó a cabo el intercambio cultural con Rusia, en un evento en el que se conjuntaron las actividades que se puedan realizar en ambos lugares.
Autoridades del municipio, encabezaron este evento en donde el jardín principal se llenó de actividades que se pueden hacer tanto en Amealco, como en Rusia, sobre todo que coinciden en el turismo étnico de aventura y que gozan de un clima regularmente fresco.
Durante este encuentro el secretario del Ayuntamiento Gustavo Mendoza Navarrete, orientó a las visitantes sobre las comunidades otomíes que se encuentran en esta demarcación elaboración de muñecas que sea consolidado a lo largo de los últimos 6 años, y que persiste precisamente por el trabajo artesanal de las mujeres de estas zonas.
Posteriormente, hicieron un recorrido por el museo de la muñeca, al recalcar que es único en México y donde colocaron a dos piezas con la vestimenta tradicional rusa y lograron identificar algunas de las muñecas que han ganado los concursos que se hacen en Amealco cada tercer fin de semana de noviembre
En su intervención, René Mejía Montoya, presidente municipal de Amealco, destacó la importancia de este tipo de iniciativas para el desarrollo y la proyección internacional del municipio.
"El objetivo de este intercambio es fortalecer una relación con la comunidad rusa en México y en el mundo. Queremos conocer su cultura y tradiciones y, a su vez, mostrarles todo lo que este bello rincón de México ofrece a quienes nos visitan",
Entre los asistentes destacados se encontraban Tatiana Bogdánova, jefa de la representación de la Agencia de cooperación de Rusia en México; la Lic. Ksenia Yakhnenko, directora de la revista "Katrina"; Albina Urazaeva, artista plástica; Petr Nevelitchkii, Presidente del Consejo de la Comunidad Rusa en América Latina; Mónica Mejía Pérez, directora de turismo de Amealco.
El evento incluyó una serie de actividades que destacaron lo mejor de ambas culturas. Se llevaron a cabo talleres de artesanía, donde artesanos locales y rusos compartieron técnicas y conocimientos sobre sus respectivas tradiciones artísticas.
Este intercambio no solo permitió un acercamiento cultural, sino que también abrió oportunidades para futuros proyectos colaborativos entre ambos grupos.
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