Desde hace casi tres semanas no hay suministro de agua potable en la comunidad de Ajuchitlancito, en el municipio de Pedro Escobedo, lo que ha desatado una crisis en la localidad, las cual ha recurrido a comprar el líquido a través de pipas para realizar sus tareas cotidianas, afirmaron habitantes de este sitio quienes solicitaron mantener en reserva sus nombres por temor a represalias.
Señalaron que los problemas del abastecimiento de agua potable en la comunidad surgieron hace seis meses, cuando comenzó el tandeo del líquido por zonas. Señalaron que al principio se habilitaba el suministro cada tercer día, luego los tiempos se prolongaron hasta llegar a este 2024, cuando se suspendió por completo la distribución del agua potable.
“En la comunidad de Ajuchitlancito está el problema de abastecimiento de agua. Siempre se batalla, pero en esta ocasión llevamos casi tres semanas sin agua. Estamos viviendo una situación muy complicada y nadie nos ha dado una solución (…). Primero empezamos por tandeos, un día echaban en agua en la parte alta y así se iban. Antes era cada tres días, luego fueron cuatro días, una semana y ahorita que llevamos tres semanas sin agua en toda la comunidad”, comentó una lugareña.
Señalaron que se han interpuesto las quejas correspondientes ante las oficinas de la Comisión Estatal de Aguas (CEA) ubicadas en la cabecera municipal de Pedro Escobedo, sin embargo, el personal de esta instancia no ha dado razones del problema y ha enviado dos pipas a la comunidad para que hagan el reparto del agua.
No obstante, habitantes aseveraron que las dos pipas que son enviadas por la CEA resulta insuficientes, pues no dan abasto a la cantidad de familias que viven en la comunidad. En ese sentido, sostuvieron que han contratado pipas particulares para que les vendan el líquido y puedan seguir con sus actividades. Señalaron que dichos proveedores cobran entre 150 y 200 pesos para llenar un tinaco.
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“La gente de la CEA solo manda dos pipas a la comunidad y para la cantidad de personas que somos no abastece nada. Entonces, estamos obligados a recurrir a contratar pipas para que nos vengan a llenar los tinacos y en eso es un desembolso de bastante dinero porque a cada rato tenemos que estar comprando el agua. Y pues, ni como no comprarla, tenemos que hacer nuestras cosas de diario”, declaró una vecina.
Aseguraron que en días pasados un grupo de vecinos de la comunidad se acercó al presidente municipal, Amarildo Bárcenas Reséndiz, para exponer la problemática que se vive. Sin embargo, aseveraron los pobladores, el alcalde se limitó a decir que era un tema que no estaba dentro de su competencia y que se acercaran a la dependencia correspondiente.