Es el punto de partida, el primer cuidado capilar: elegir el champú adecuado nos ayudará a mantener el cabello limpio y suelto por más tiempo. Algo aparentemente tan sencillo como la elección del champú, no lo es tanto y, sin embargo, es fundamental seleccionar el que mejor vaya a las características de cada uno.
En cuanto a la frecuencia de lavado, "lo ideal es hacerlo dos veces a la semana", explica Yolanda Izquierdo, experta capilar de Montibello. “Debemos tener en cuenta que lavarlo muy frecuentemente debilita el cabello y, sobre todo, el cuero cabelludo. Además, lo desestabiliza lo que puede provocar picores, irritación, descamación y exceso de grasa o sequedad”.
Recomienda masajear suavemente durante el lavado, no frotar insistentemente "La fricción del cabello no aporta limpieza y complica el desenredado".
La piel del cuero cabelludo es "la gran olvidada en lo que a cuidados capilares se refiere", apunta Yolanda Izquierdo, quien recomienda realizar una exfoliación capilar, de una a dos veces al mes, con un “peeling” suave adecuado para esta zona que oxigena, elimina residuos, células muertas e, incluso, mejora el exceso de sebo.
Cuando el cuero cabelludo está equilibrado e hidratado, los bulbos pilosos producen fibras capilares de buena calidad. Patrick Alès, pionero en la creación de tratamientos innovadores para el cuidado del cabello a base de plantas y fundador de los Laboratorios Phyto se guió por esta máxima a la hora de proponer sus cosméticos y tratamientos: "No existe un cabello bonito sin un cuero cabelludo sano".
Enriquecido en aceites esenciales, uno de los productos de la firma Phytopelléine es un revitalizante para el cuero cabelludo, que purifica y restaura su equilibrio (exceso de sebo, caspa, sensación de incomodidad) y estimula la microcirculación.
PROTEGERLO DEL CALOR
El encrespamiento, la falta de volumen o una forma poco atractiva son algunos de los problemas capilares más frecuentes. Para combatirlos, se suele recurrir a fuentes de calor, como secadores, planchas o rizadores. Pero si no se utilizan de manera adecuada puede volver nuestro cabello seco, quebradizo, sin brillo ni vitalidad.
Según los estilistas, lo adecuado es no acercar demasiado el secador a la fibra capilar, utilizando un cepillo térmico adecuado para repasar la forma y alternando la temperatura para sellar mejor el peinado y no producir daños. Con planchas o rizadores, deberemos controlar muy bien el tiempo que dejamos el cabello expuesto y utilizar un protector térmico del calor.
"El cabello seco y poco manejable se agrava si no se hidrata lo suficiente", explica Rubén Torres, director de ÌO Salón, quien recomienda utilizar esprays antifrizz en cabellos ondulados, y aquellos enriquecidos en ácido hialurónico para redefinir e hidratar, o aceites, mascarillas exprés y espumas.
Fran Galán, colorista y estilista de The Beauty Concept Hair, apunta que "todo lo que rodea a un cabello saludable y bonito pasa por una correcta protección, cuidado y mantenimiento".
Para iluminar y potenciar el brillo capilar recomienda colorear el cabello con una mezcla de las tonalidades miel, trigo y dorado, aunque también destaca una terapia de colágeno, que aporta "hidratación y nutrición actuando allí donde realmente es necesario gracias a la tecnología de activos bifuncionales inteligentes que aportan elasticidad, brillo y relleno al cabello".
Entre los tratamientos que favorecen el cuidado del cabello, aconseja Olaplex, especialistas en este sector, uno para restaurar la fibra con un conjunto de proteínas y aminoácidos "perfectos para conseguir la reparación del cabello".
Por último y en caso extremos, Galán apuesta por "cortar por lo sano. Puede que sea uno de los gestos más rechazados, pero, sin duda, es uno de los más efectivos y necesarios".
Cortando las puntas antes de que el calor arrecie, lograremos que el pelo tenga un aspecto más "saludable y con mayor densidad", descarta las melenas extralargas con las puntas abiertas y poca densidad, "la poca calidad de la fibra hace que no se vea un cabello bonito", indica.