Seis gorilas de montaña han nacido desde comienzos de año en el famoso Parque Nacional de Virunga, en el noreste de la República Democrática del Congo (RDC), pese la inseguridad reinante en la zona, confirmó este lunes a Efe el Instituto Congolés para la Conservación de la Naturaleza (ICCN).
"Es una especie muy escasa que está prácticamente en vías de desaparición. Por eso, esto nos hace muy felices", dijo el director general del ICCN, Cosmas Wilungula Balongelwa.
De los alrededor de 800 ejemplares que quedan en el mundo, algo más 400 viven en la RDC, según el director general.
"Ha habido un esfuerzo para mejorar las condiciones de trabajo y también para el monitoreo. Lo que hace que los gorilas tengan tiempo para reproducirse, porque hay que admitir que el parque está ubicado en una zona de guerra, de conflicto permanente", subrayó Balongelwa, en alusión a la mayor calma que se ha logrado en el parque.
Virunga, que constituye uno de los pocos destinos turísticos de esta nación centroafricana y es Patrimonio de la Humanidad desde 1979, se halla en una de las zonas afectadas por la violencia de grupos armados en la RDC.
"Este es un problema crucial, que bloquea nuestro trabajo. Tenemos guardias que son asesinados casi todos los meses por hombres armados. Es muy duro", afirmó el director general, quien también se refirió al peligro de los cazadores furtivos.
Dentro de los límites del parque se encuentra el volcán Nyiragongo, uno de los más activos del mundo, al que los turistas ascienden para contemplar el lago de lava que aloja su cráter.
Sin embargo, la principal atracción turística del parque son los gorilas de montaña, que atraen a los turistas extranjeros principalmente debido a que los precios para poder verlos son inferiores a los de Uganda y Ruanda, países en los que también es posible avistar a estos primates en su hábitat natural.
El este y el noreste de la RDC llevan años sumidos en un largo conflicto entre numerosos grupos rebeldes, que siembran el terror a diario entre la población local pese a la presencia del Ejército congoleño y las fuerzas de la misión de paz de la ONU (MONUSCO).