El humo blanco finalmente llegó a La Noria. Jaime Ordiales ocupará el puesto que dejó vacante Ricardo Peláez a finales de septiembre y se ocupará de todas las situaciones deportivas en Cruz Azul. El nuevo mandamás cementero tendrá un Consejo por arriba de él y cada decisión tendrá que pasar por un consenso para su realización.
El anuncio tardó más de lo previsto debido a que Ordiales mantenía contrato vigente con los Gallos Blancos, donde fungía como presidente. Fue el jueves cuando la institución queretana anunció la salida de Jaime. Ya todo estaba acordado, lo demás fue cuestión de tiempo.
"La familia Álvarez me hizo la invitación a la posibilidad de que sí yo cambiaba de equipo, tenía las puertas abiertas. Yo tenía un contrato hasta el 15 de diciembre, platicamos y se abrió este espacio. Yo analizaba muchas cosas, pero estaba con otra institución, no podía aterrizar nada y apenas lo voy a hacer, me trataré de empapar lo más rápido posible para aportar y sumar", admitió.
Jaime Ordiales, fiel a su costumbre se mostró respetuoso con todas las partes involucradas y hasta con el dueño de Grupo Caliente, y ahora también de los emplumados.
"Por respeto y por ética yo estaba entregando una compra-venta de un equipo, que como presidente, tenía que estar en cada instancia. Ante esa oportunidad me reuní con Jorge Hank y también me abrió la puerta para salir y venir acá", remató.