Lobos de San Juan del Río es uno de los equipos con mayor tradición en el voleibol, con 8 años de historia ha figurado en los primeros lugares, informó Fidel Aguilar Zúñiga, jugador, quien contó que el trabajo en equipo ha hecho que el combinado permanezca.
Dijo que la pasión por el juego y la competencia son el común entre los jugadores lo que hace que cada uno dé lo mejor de sí dentro y fuera de cancha.
El jugador definió el voleibol como competencia. Hubo un tiempo en que varios compañeros tuvieron que alejarse del club por el estudio, entraron en horarios fuera de posibilidades de los entrenamientos.
“Dentro del equipo mixto llevamos 5 torneos, hemos llegado al campeonato dos veces, perdimos la final del pasado torne. En el actual torneo estábamos peleando las primeras posiciones. Íbamos en un buen lugar en la tabla general”, detalló el jugador.
El equipo lo conforman hermanos y amigos voleiboleros que se conocen de hace años.
El equipo participa en la Liga Unidos con el nombre de Minions, que surgió hace dos años, desde entonces ha estado compitiendo en la liga y cuando llega haber un evento lleva con orgullo y responsabilidad el nombre de San Juan del Río.
Todos los integrantes del club además de ser buenos jugadores son estudiantes, algunos en la universidad, hasta secundaria, pues un principio en el equipo es inculcar el buen desempeño académico, lo que los ha llevado a formar parte de los selectivos de sus instituciones.
“Con la categoría mixta la historia comenzó hace 2 años con el objetivo a dedicarse a generaciones presentes porque están mas acostumbrados a competir en la O.N que poco a poco ha dejado de existir”.
El objetivo fue formar a niñas de cualquier edad que quisieran formar parte. Se ha formado un buen equipo. El año pasado estuvieron en la Copa Huichapan logrando el fogueo, agregó.
Por último, dijo, una vez que pase el confinamiento Lobos volverá a los entrenamiento en el anexo de Cecuco, los lunes, miércoles y viernes de las 20:00 a las 22:00 horas, y sábados de 11:00 a 13:00 en el Parque Fátima.